Las zonas rurales de la ciudad proceden del antiguo municipio de Oza, anexionado en 1912

La Voz

A CORUÑA CIUDAD

28 mar 2010 . Actualizado a las 03:00 h.

Los núcleos rurales que subsisten en A Coruña proceden del antiguo municipio de Oza, que desapareció para integrarse en la actual ciudad en 1912. En ese año el viejo ayuntamiento contaba con diez mil habitantes repartidos en cuatro parroquias: San Pedro de Visma, San Cristóbal das Viñas, San Vicente de Elviña y Santa María de Oza. El término municipal contaba en ese momento con 2.071 edificios. La mayoría se levantaban en Santa María de Oza (668), San Vicente de Elviña (534) y San Cristóbal das Viñas (536), mientras que en la parroquia de San Pedro de Visma solo había 333.

Oza arrastraba en aquel lejano 1912 una deuda de 650.000 pesetas, de la que se hizo cargo el Ayuntamiento coruñés. Y es que su carácter eminentemente rural no parecía producir el nivel deseado y necesario de impuestos para sostener su extensión de 29 kilómetros cuadrados. Una superficie que cuadriplicaba la que tenía A Coruña, que en aquel entonces se quedaba en 7,85 kilómetros cuadrados. El diccionario geográfico de Pascual Madoz explica que el desaparecido concello producía «grandes cantidades de maíz, centeno, trigo, lino y varias clases de frutas».

Antes de la anexión de Oza en 1912, el término municipal de A Coruña contaba con 50.000 habitantes, y tras la absorción pasó a contar con 60.000 y una extensión de 36,84 kilómetros cuadrados, como explica Alfonso González Catoyra en el libro Temas coruñeses .

En la ciudad todavía perduran topónimos procedentes del antiguo ayuntamiento como Castrillón, Someso, Nostián, los Castros, Feáns, Mesoiro o Eirís. Actualmente, esos antiguos lugares pertenecientes a las cuatro parroquias de Oza son populosos barrios de la ciudad.