Baldosas de los rodapiés desprendidas, humedades en las paredes o trozos de pared con la pintura desconchada que van tiñendo el abrigo a todo el que las roza. Esa es la imagen que puede verse en el interior de uno de los edificios de protección autonómica levantados en la zona de Eirís. La escena es la misma en el primero que en el tercero. Ese es uno de los bloques de viviendas objeto de polémica por el retraso en la adjudicación, un proceso dilatado también por las protestas vecinales generadas por el presunto realojo de chabolistas en la zona. Algunos de los beneficiarios llevan aguardando para mudarse desde hace año y medio, cuando fue publicado el listado.
Pero parece que la espera depende de una reforma que empezará a ejecutarse esta semana. Anteayer, según la Xunta, y ayer, en base a los datos del Ayuntamiento de A Coruña, este último concedió, más de un mes después de haberse pedido la licencia para instalar unos ventanales que impidan la entrada de la lluvia en las zonas comunes con acceso directo a las puertas de las viviendas. La actuación es fundamental para frenar la generación de humedades. La licencia, tal y como explicó el delegado del Gobierno autonómico en la provincia, Diego Calvo, permitirá iniciar la obra esta semana para luego arreglar los desperfectos que hay en el interior. También adelantó que el sorteo de estas viviendas y las de Novo Mesoiro lo harán a final de mes. Por eso, la entrega podría realizarse entre enero y marzo, cuando el inmueble recupere «a habitabilidade» al haber rematado la obra. Los fondos para ejecutarla alcanzan los 150.000 euros.
Las condiciones en las que está el inmueble son una de las razones del retraso, pese a que el Ayuntamiento de A Coruña reitera que los pisos pueden darse porque, como explica la Xunta en la petición de licencia, los pisos de Eirís «están totalmente terminados», explica el gobierno local. También apunta que cuentan con licencia de primera ocupación desde el 9 de marzo, notificada a la Xunta tres días después.
También explica que la licencia pedida no es para arreglar supuestos daños del huracán Klaus , ya que es para colocar los ventanales en las zonas comunes que hay en dos portales del citado inmueble. El lugar fue mostrado ayer por el delegado a un grupo de vecinos que pudieron ver los daños.