Raphael se fue de la ciudad con «el deseo de regresar pronto»

A. Mahía / R. Iglesias

A CORUÑA

El artista, agasajado con una figura de la Torre, fue despedido ayer de la ciudad a primera hora por varios fans

16 ago 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Raphael se despidió de A Coruña con la promesa de regresar pronto. Fue un adiós muy besucón. Varios fans acudieron ayer a primera hora al Hotel NH Atlántico, donde eligió hospedarse el artista para agradecerle el concierto y comérselo a besos: «Me puedes dar uno a mí también», rogaban. Y él atendió todas las peticiones, siempre con la risa en su rostro, atento a los halagos. No podía faltar la representante en A Coruña de la Asociación Raphaelista, Raquel Andreu, que alabó el derroche del cantante durante dos horas y media de un repertorio forjado con 50 años sobre el escenario. «Está en un momento pletórico», afirmaba una mujer feliz por el gran éxito que tuvo el Niño de Linares en su fugaz pero intensa presencia en la ciudad.

Fueron cinco horas encerrado en el camerino de Riazor preparando la voz, dos horas y medio de concierto en las que fue hilando canciones suyas, de otros y, casi, del público, seis horas de sueño, unos besos de despedida y una promesa: «Deseo regresar pronto». Así sea, le contestó María de Carmen García, secretaria de comunicación de Unión Coruñesa, que le entregó al artista una réplica de la torre de Hércules, similar a la que el presidente de la formación, Carlos Marcos, regaló a los componentes del Consorcio, con los que cenó tras el concierto.

Mientras, el concejal de Fiestas, Carlos González-Garcés, se mostró muy satisfecho del concierto de la noche del viernes, con una magnífica afluencia de público. No quiso olvidarse de los críticos. Apuntó al respecto que las actuaciones del Consorcio y de Raphael fueron «una maravilla, algo que los coruñeses recordarán a pesar de esos», en referencia a los manifestantes contra la presencia de estos artistas en el cartel del Noroeste Pop Rock.

El alcalde, Javier Losada, que siguió el concierto muy animado, se declaró gran admirador de Raphael y se mostró «encantado» con la respuesta de los coruñeses, al acudir en masa a la playa a presenciar «uno de los conciertos más bonitos de los últimos años en la cidade», según indicó.