Décadas de historia. Sus propietarios están hundidos. El negocio se va a pique. El próximo lunes la histórica librería Cartamar del paseo de Ronda cerrará sus puertas para siempre. «Los viejos del lugar nos dicen que cuando se inauguró la Escuela de Náutica, hace 50 años, ya existía este local», apunta la actual responsable del establecimiento, Ana Pardo Morgade . A Coruña se queda sin su librería técnica marítima. «Hay otras que venden cartas náuticas o material relacionado con el tema, pero como librería específica es la única que existe», me comentan desde la biblioteca de la Escuela de Náutica. Hace tres años que Ana se puso al timón de Cartamar e invirtió tiempo y dinero para sacarla a flote, pero ahora desiste porque «no da, no da», se lamenta. Los alumnos de la cercana escuela pierden la librería a la que durante décadas fueron a comprar los libros y el material que les requerían sus profesores. «En verano también venían muchos ingleses y franceses que nos mandaban aquí los del Real Club Náutico», recuerda Ana. La parte delantera del bajo es un quiosco tradicional y al fondo están situadas las estanterías con un sinfín de libros. Me llama la atención un hermoso cuadro de cabuyería que cuelga en la pared. «Lo hizo un marinero de Malpica y se lo acabamos de vender a la Xunta para el despacho de un alto cargo», relata Ana mientras señala los nudos. Cartamar vive sus últimas horas de navegación.
Y también pingüinos y hasta harekrisnas se pasearon ayer por el centro de la ciudad. No es de extrañar la cara de sorpresa de ciudadanos como el que aparece en la imagen tomada en el Obelisco. ¿De dónde salieron semejantes personajes? Pues se trata de un grupo de actores que estos días recorren distintos puntos de A Coruña para promocionar el Festival Internacional de Teatro Manicómicos, cuya primera actuación tendrá lugar este viernes. «Representan a gentes de fuera, llegadas de muy lejos, hasta de otros planetas, que vienen a ver el festival», me explica Willy Eter , uno de los promotores del atractivo certamen, cuando le pregunto por el curioso espectáculo callejero de ayer, que, «en realidad, ya forma parte del propio festival», precisa.
Tanto, que tienen pensado celebrar una exposición colectiva en agosto en la que presentarán cuadros en los que A Coruña será el tema común de todos los trabajos. «Queremos sumarnos así a los actos conmemorativos del 800 aniversario de la ciudad», destaca Mari Carmen Calviño , vicepresidenta de la Asociación de Artistas. La muestra sería en la sede del colectivo que preside Miguel Zelada , en la calle Riego de Agua, un local con solera. Una original iniciativa que dieron a conocer el sábado durante el almuerzo de confraternidad que celebraron en el Sporting Club Casino con motivo del día de su patrón, Fra Angélico. «Desde que hace 75 años José Seijo Rubio fundó la asociación es la primera vez que organizamos una comida», relata Calviño.
Así se titulaba la conferencia con la que ayer arrancó en la sede de la Fundación Caixa Galicia el ciclo Leyendas del canto. El encargado de pronunciarla fue el crítico musical de La Voz César Wonenburger , que repasó la trayectoria del tenor italiano.