El motorista fallecido en Zas eleva a 13 los muertos de tráfico

Juan Ventura Lado Alvela
Juan ventura lado CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

La mayor parte de los siniestros graves se produjeron en el último mes

21 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La muerte en el hospital de Emilio Ramos Cundíns, el vecino de Borneiro arrollado el miércoles por la tarde en Zas, eleva a 13 las víctimas del tráfico registradas en la Costa da Morte en lo que va de año. El motorista, de 76 años, invadió la carretera comarcal AC-552 con su ciclomotor en la zona de A Cacharosa (Baio). El conductor de un Seat Ibiza, que venía adelantando con su vehículo a un Citroën Xsara Picasso, no pudo detenerse a tiempo y se lo llevó por delante. Aunque el 112 desplazó un helicóptero, que trasladó al herido al hospital de Santiago, las lesiones que sufría eran demasiado graves y murió en torno a las 22.15 horas.

Estos 13 fallecimientos se produjeron prácticamente todos en la segunda mitad del año y se concentraron, sobre todo, en los últimos 25 días, en los que perecieron cinco personas, dos de ellas motoristas.

La primera víctima del 2011 fue Roberto Souto Garrido, que tenía 33 años, y sufrió un accidente en la carretera de Coristanco a Santa Comba el 4 de julio. El 29 de ese mismo mes, Ismael Romero Grela, de 22, cayó a en un río de A Ponte do Porto, dentro del coche y no salió.

El matrimonio de octogenarios formado por Andrés García Álvarez y Hermitas Janeiro Couselo, ambos de Pontevedra, se vio implicado en una colisión múltiple en la carretera de Castrelo a Baíñas (Vimianzo). Fallecieron dos días después en el hospital. Solo unas horas más tarde, el niño Andrés García Álvarez invadió la carretera de Vilachán (Muxía) con su bicicleta y el coche conducido por un vecino suyo se lo llevó por delante.

El día 16 de ese mismo mes, la joven Vanesa Modía, de Monterroso (Lugo) quedó aplastada por la carga del camión que conducía en el lugar de Requesende, de la parroquia larachesa de Golmar. Tenía 27 años.

Horas antes de acabar agosto, José Antonio García Fernández, de 45, fue atropellado a escasos 100 metros de sus casa, también en A Laracha, aunque en la parroquia de Lestón.

El 4 de septiembre, la víctima volvió a ser otra adolescente: Yésica Alborés Pérez, una laxense de 14 años, que murió al volcar el coche en el que viajaba de pasajera.

Los siguientes integrantes de esta trágica lista, el carnotán Borja Oreiro Pérez y el Corcubionés Antonio Cives Trillo, ambos de 20 años, sufrieron un accidente de madrugada en la carretera del faro Cee, el 25 de septiembre. También regresaba a casa de una fiesta, el joven de Santa Comba de Baíñas Martín Blanco Caamaño, que perdió la vida en las curvas de Regoelle el 13 de octubre. Tenía 26 años.

Esta semana, además del fallecimiento del septuagenario de Borneiro ocurrido el miércoles por la noche, ya se había producido otra muerte el lunes. La víctima fue el gerente de la empresa de Noia Autocares Ferrín, que tenía 45 años. Cayó con su motocicleta en una curva de la carretera que une Zas con Santa Comba e impactó contra una señal de tráfico.