Las catas sacan a la luz los restos del castillo del Soberano

carballo / la voz

CARBALLO

Aparece el polvorín, el foso y las rampas en la fortaleza de Camariñas

07 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Los sondeos arqueológicos han sacado a la luz el patrimonio escondido (más bien, tapado por escombros, maleza y olvido) de los restos del castillo del Soberano de Camariñas. Al igual que ocurrió con la ermita de San Guillerme de Fisterra, el castro de Ogas en Vimianzo o el de Soesto, ha sido una empresa privada (la viguesa Ares), contratada por el dueño de la fortaleza, la encargada de llevar a cabo los trabajos, que concluyeron hace ya unos días.

En total, autorizados y supervisados por los técnicos de Patrimonio de la Xunta, se realizaron cuatro sondeos arqueológicos, que han permitido constatar el buen estado de conservación de lo que queda de las ruinas de la fortaleza.

Así, en uno de ellos se descubrió parte de la habitación que albergaba el polvorín del edificio, del que se puede ver la puerta, el suelo y las paredes, con metro y medio de alzado, en un estado de conservación muy razonable.

En los otros salieron a la luz la parte interna del foso interior y las rampas de acceso. En este caso se pueden apreciar el suelo y las paredes también en un estado aceptable para todo lo que han pasado en estos años.

El dueño de los restos del castillo, Juan José González Soto, señala que la intervención ha sido muy bien valorada por los técnicos de la Xunta y por los propios responsables de las catas. «Los técnicos de Patrimonio ya intuían que quedaba bastante edificio por descubrir», señala el empresario camariñán.

Soto indica que propuso, en varias ocasiones, la cesión gratuita de la fortaleza al Concello camariñán a cambio de una recalificación de los terrenos anexos, que también son de su propiedad, y respetando (no podría ser de otra manera) la línea de protección de Costas, donde pretendía construir un negocio hostelero. En su proyecto incluiría la prestación de servicios a los visitantes a la zona.

No obstante, ante la negativa por parte del ejecutivo local, ha optado por realizar un proyecto distinto en parte de los restos del castillo, que incluye una reconstrucción. Falta el visto bueno de Patrimonio, pero ya ha mantenido conversaciones con técnicos de este departamento, además de con los de Costas.

La iniciativa no es nueva. Hace casi dos años, el director xeral de Patrimonio, José Manuel Rey Pichel, ya visitó el lugar, acompañado del dueño del terreno; el alcalde, Manuel Valeriano Alonso de León, y el portavoz del PP, Daniel Rego, y ya en aquel momento expresó su intención de aprovechar la riqueza patrimonial para levantar un negocio. De hecho, había comenzado por su cuenta la limpieza, pero tanto el Concello como Patrimonio habían paralizado las labores por falta de permiso.

El castillo Nuevo Soberano fue mandado construir por Carlos III en el siglo XVIII para defender la ría de incursiones enemigas. El Ejército lo vendió más tarde a José Álvarez-Pardiñas Mourín. Finalmente, sus descendientes se lo vendieron al propietario actual.