El alcalde explica que la mitad de los fondos municipales se invirtió fuera del casco urbano y que su política en los próximos años seguirá por el mismo camino
06 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.«Pretendemos que en Cee non haxa cidadáns de primeira e de segunda»
? El Concello de Cee invirtió más de 3 millones de euros en obras en las zonas rurales del municipio durante los últimos cuatro años. El Ayuntamiento, explica el alcalde, Ramón Vigo, recibió inversiones por más de 10 millones de euros en ese período. De esa cantidad, algo más de 4 millones fueron para canalizar los ríos y prevenir posibles inundaciones. El resto se repartió, explica el alcalde, a partes iguales entre el casco urbano y el resto del municipio. «Hai que darlle impulso á vila, pero sen esquecer ao medio rural, pretendemos que non haxa cidadáns de primeira e de segunda», dice el regidor.
Esa política, explica, es la que piensan seguir manteniendo en los próximos años en Cee.
Los desembolsos realizados sirvieron para obras muy diversas. Así, destacan los 217.000 euros que el Concello de Cee destinó, a través del Plan E, a la instalación de Internet en las parroquias mediante un sistema wifi. Están preparados los equipos y solo falta ponerlos en marcha. Serán en las próximas semanas y, durante un tiempo, gratis. Después se instalará un sistema de pago por medio de una empresa que gestionará la concesión.
La partida más cuantiosa, recuerda el alcalde, es para algo que no se ve. En saneamiento fuera del casco urbano se gastaron 567.000 euros, cantidad repartida entre Pallares, O Son, Tedín, Ruibo, Pereiriña y Brens. Otros 130.000 euros fueron para reparar varias depuradoras que estaban instaladas desde hacía un tiempo pero no cumplían su cometido. Todas lo hacen ahora.
Para aceras fueron 345.000 euros repartidos entre la travesía de Ameixenda y las obras de Raso, Toba y Bermún. Otra partida importante fue la de pavimentación de calles. Para ese fin fueron 645.000 euros que se pueden ver en Toba, Sembra, Xallas, Chafarís, Cabaleriza, Morancelle y otros puntos. Además, se abrió, con 88.000 euros, una nueva entrada a Fadibón.
Se hicieron también áreas de descanso en Lobelos y Xallas con una inversión de 90.000 euros y parques infantiles nuevos en Ameixenda y Pereiriña, y renovados en Camiños Chans y Brens, además de dejar listas varias unitarias para su uso como locales sociales. La idea es seguir haciendo obras en las parroquias.