El Concello de Zas se suma al de Laxe en la lista de los municipios libres de cultivos transgénicos

La Voz CEE/LA VOZ.

CARBALLO

24 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El Concello de Zas aprobó la semana pasada en pleno la propuesta de declaración del municipio como libre de cultivos transgénicos.

La decisión se tomó en una sesión en la que todos los partidos apoyaron la iniciativa, remitida a Zas por una asociación, Tres de Maio, de Negreira.

El de Zas se suma así al de Laxe, que el pasado día 14 ya había dado ese paso en pleno. Desde la entidad promotora explican que su objetivo es llevar la propuesta a todos los ayuntamientos gallegos posibles. Las corporaciones, dicen, tienen competencias en salubridad y salud pública, por lo que creen que pueden promover ese tipo de iniciativas.

Una vez dado el paso, el ayuntamiento comunica a la Consellería de Medio Rural la decisión acordada. Además, desde la asociación piden que se solicite a la Xunta que se sume a la medida para hacer frente los cultivos transgénicos.

Desde Tres de Maio explican que lo tratan es de parar la proliferación de ese tipo de agricultura que sustituye a la autóctona y que no tiene garantías de salubridad adecuadas.

La misma propuesta presentada en Zas y Laxe llegará en las próximas semanas a otros municipios de la zona.

La asociación Tres de Maio es una entidad vecinal de la parroquia negreiresa de Santa Cruz de Campolongo. Arrancó su cruzada contra los cultivos no naturales hace dos años. Entonces remitió propuestas similares a las que salieron adelante en Laxe y Zas a los ayuntamientos de Negreira, A Baña, Santa Comba, Mazaricos, Dumbría, Zas, Vimianzo, Outes, Carnota, Muros, Noia, Lousame, Rois, Brión y Ames.

Alimentación natural

La entidad considera que la naturaleza ha creado diferentes variedades vegetales que no son fruto de la casualidad, y que gracias a ellas se pudo mantener la sociedad durante siglos. Sostienen, además, que una alimentación natural, sin transgénicos, contribuye a mejorar la salud y la calidad de vida de quienes la practican, algo que no garantizan los nuevos productos vegetales fruto de un diseño de laboratorio.

La asociación defiende, asimismo, que la modificación genética de especies supone un riesgo innecesario.