El edificio del Cabo de Fisterra cerró el 2009 con 160.656 visitantes, lo que significa un crecimiento del 55% sobre el año anterior (103.192), según los datos municipales. Esta cifra se refiere solo a las personas que acceden a las dependencias del faro, contabilizadas por las informadoras turísticas. En verano y épocas festivas, el horario es de mañana y tarde, pero en la actualidad, solo de tarde. Por ello, la cifra total de visitantes al Cabo es muy superior. La última vez que se contabilizó fue en la época de la anterior Consellería de Cultura del Gobierno Fraga, y la cantidad oficial rondó los 600.000 al año, la segunda mayor de Galicia, tras el Obradoiro. La tercera era la Torre de Hércules, aunque puede que ahora, Patrimonio de la Humanidad, haya crecido. El pasado mes batió su récord de enero, con 3.565 turistas (en el faro fisterrán fueron 2.581, con un horario muy reducido, aunque sin pagar la entrada, como sí se hace en A Coruña). Por procedencia, 157.907 fueron europeos; 2.668, americanos; 355, asiáticos; 21, africanos, y 105, de Oceanía. El mejor mes fue agosto, con 50.763 visitas, seguido de septiembre, con 23.123, y julio, 18.560.
La gestión del faro corresponde a Neria, aunque la comparte con el Concello, tras un acuerdo entre ambos. La entidad supracomarcal también se encarga de otros puntos de la Costa da Morte. En los Batáns do Mosquetín hubo 14.050 visitantes; en las Torres do Allo 19.001 (cifras muy similares a las del 2008); en el faro de Cabo Vilán, 42.400 (el año anterior no estuvo abierto todos los meses) y en el museo de la electricidad de O Ézaro, 18.760 personas.