La comarca de Fisterra sólo tiene agua embalsada para dos meses

La Voz

CORISTANCO

08 nov 2007 . Actualizado a las 03:41 h.

El mes de octubre con menos lluvias que se recuerda en la zona ha dejado los embalses casi secos. El de referencia en la comarca, el embalse de Fervenza, cuenta sólo con 0,42 millones de metros cúbicos de agua, es decir, menos del 0,5 por ciento de su capacidad máxima. El dato es de ayer. Hoy, sin previsión de lluvia, el nivel seguirá descendiendo como ha hecho a lo largo de las últimas semanas.

Sólo queda el caudal ecológico del río como fuente de suministro de agua. Y está bajando. Desde que se toman mediciones en el embalse, explican desde Ferroatlántica, empresa que tiene la concesión de la explotación hidroeléctrica del Xallas, nunca estuvo así.

Los datos pluviométricos que maneja la empresa son suficientemente elocuentes: en todo octubre sólo cayeron 44 litros por metro cuadrado. Para encontrar un octubre más seco hay que remontarse hasta 1970. En octubre del año pasado se registraron 657 litros por metro cuadrado. Entonces las turbinas generadoras funcionaban todo el día. Este año dejaron prácticamente de funcionar hace un mes, porque a la sequía de octubre se le suma la de septiembre: sólo 39 litros por metro cuadrado. En el mismo mes, el año pasado, llovió cuatro veces más.

El problema de Fervenza no es sólo para la empresa. De ese embalse parte el agua que llena otro embalse mucho más pequeño, el de Santa Uxía, que se llena con 18 millones de metros cúbicos -Fervenza necesita 104 millones-. Ayer estaba casi lleno, con 17,7 millones de metros cúbicos.

En ese embalse se toma el agua para el suministro doméstico de los municipios de Cee, Corcubión, Fisterra y Dumbría. Si la falta de lluvias persiste -y la previsión es que no haya cambios sustanciales en los próximos quince días- esa reserva sólo bajará, ya que no hay caudal suficiente para reponer el agua destinada al consumo.

Actualmente no hay problema alguno de suministro, pero si las cosas siguen igual, desde la empresa explican que quedaría agua para garantizar el suministro durante uno o dos meses, no más. A partir de entonces empezaría a haber problemas.

También desde la EFA Fonteboa, en Coristanco, donde al igual que en Fervenza se realizan mediciones meteorológicas, constatan que los manantiales por los que habitualmente discurre el agua están actualmente secos, como consecuencia de una prolongación anómala del verano. La sequía que afecta a los acuíferos puede repercutir negativamente en el campo.