Los empleados de la estación de servicio ubicada en el puerto de Ribeira tenían ayer más trabajo de lo normal. Hasta dichas instalaciones se acercaban decenas de vecinos que se interesaban por los daños causados en sus vehículos como consecuencia de que el combustible que le pusieron no era el adecuado porque, debido a un error, en el tanque se mezcló gasolina y gasoil. Los trabajadores pagaban en efectivo el importe del carburante servido a los usuarios el fin de semana y que causó daños en los motores de sus lanchas o automóviles. Al mismo tiempo, les conminaban a llevar la factura del taller donde repararon los desperfectos para abonársela.
Algunos afectados señalaron que ayer mismo acudieron hasta el surtidor para interesarse por la situación, tras formular sus quejas con anterioridad: «O primeiro que fixeron foi darme o importe da gasolina que lle botei ao coche o fin de semana», comentó el propietario de un turismo que tuvo que ser reparado en un taller. A continuación, un operario de la empresa apuntaba el nombre del afectado y le explicaba los pasos siguientes para poder recuperar el dinero de la factura.
Algunos conductores que se pasaron por las instalaciones de la estación de servicio en el día de ayer señalaron que les comentaron que a partir de hoy incluso ya podrían cobrar las reparaciones.
Por otra parte, cabe señalar que también se acercaron al negocio varias personas que habían comprado gasolina para los motores de sus embarcaciones y que todavía no habían usado. Eran desviados hacia otro lugar para que les cambiasen el combustible. Aunque todavía se desconoce el número exacto de afectados, algunas fuentes apuntaban que podría haber hasta trescientas personas.
El colectivo de marineros también se vio perjudicado, pues muchos de ellos repostan en esta estación de servicio al estar al lado mismo de los pantalanes de artes menores. El patrón mayor, José Antonio Pérez, indicó que el problema pudo ser peor, pues al producirse en fin de semana «afectou a menos barcos porque non saen a faenar»
Contratiempos
Los problemas comenzaron a surgir en los repostajes hechos entre el viernes y el domingo. Muchos coches, nada más salir de la gasolinera, iban a golpes y no funcionaban.
Al parecer, lo que ocurrió fue que a la mayoría de clientes le sirvieron mal el carburante, pues se mezcló gasolina en el tanque del gasoil, causando numerosos contratiempos entre los automovilistas.
A pesar del problema causado a decenas de usuarios, representantes de la estación de servicio ribeirense declinaron hacer cualquier tipo de comentario sobre lo sucedido.