Manuel Mariño Santamaría (Carreira) es, a los 62 años, el de más edad de todos los adscritos a la delegación de Boiro
23 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.La delegación boirense del colegio de árbitros de Santiago establece récords en varios registros. Es la única de toda la comunidad gallega que cuenta con un juez subsahariano, el senegalés Mar Thiaw. Pero además también es un colectivo en el que figuran jueces muy entrados en años. Dentro del ámbito barbanzano, el mayor de todos es Manuel Mariño Santamaría (Carreira), quien el pasado mes de octubre cumplió 62.
Aunque desde el Comité Gallego se ha informado de que los jueces de edades tan avanzadas -la retirada en las competiciones de mayor rango está situada en los 45- entrañan un riesgo evidente, «razón por la cual no nos los admite la Mutua», argumentaron, lo cierto es que hombres como Mariño Santamaría echan una mano a la hora de impartir justicia en los numerosos encuentros de categorías menores que se celebran durante los fines de la semana en el ámbito territorial de Barbanza, a la vez que mantiene una saludable actividad física.
Santamaría se acercó al mundo del arbitraje «polo amor que sempre lle tiven e aínda teño ao deporte», pero también porque después de abandoar el fútbol veterano, Alberto Suárez Pazos, responsable de la delegación boirense, también lo animó a colgarse el silbato.
Dos han sido los ámbitos a los que siempre estuvo atado el colegiado carreirense: el mar, como vocación profesional y donde se ha ganado la vida hasta que se jubiló con 55 abriles, y el fútbol: tras pasar por los juveniles del Arousa se convirtió en jugador-fundador del Atlético Ribeira, pasó por el Palmeira cuando este militaba en la antigua Serie A, una competición equivalente a la Preferente de ahora. También practicó el futbol sala y luego se integró en el Restaurante Ribadavia en el campeonato de veteranos de Santiago, «de onde saín porque os máis novos pedían paso».
Desde los 59 se ha dedicado a dirigir partidos de Tercera Autonómica «para baixo». Pero la actividad de estos abnegados del deporte tiene los telediarios contados: «Porque, ademais do perigo que supón o que xa sexan tan maiores, tamén hai moitos rapaces novos que queren dedicarse ao arbitraxe e hailles que facer sitio», comenta Alberto Suárez Pazos.
Santamaría se cuida y mucho para llegar en las mejores condiciones a los partidos. Practica deporte diariamente: «Sempre me sentín moi implicado con todas as actividades deportivas. O pasado ano incluso cheguei a participar na carreira popular de Santiago para experimentar unha competición de longo percorrido, para a cal, me preparei como é debido», argumenta.
Mariño Santamaría lidera una lista de compañeros que también cuentan con un buen lote de años a sus espaldas: Tubío Piñeiro (55), Alberto Suárez Pazos y Rafael Vicente González (53) y Ferreiro Antelo (52). Aunque adscritos al de Santiago, Romero Rama y Martínez Brión son otros dos veteranos colegiados de la zona de Muros.