Escolares de Cespón se vuelven expertos en plantaciones

BARBANZA

Los alumnos colaboran con la comunidad de montes en la repoblación de un terreno

19 mar 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El curso pasado, la dirección del colegio de Cespón pidió permiso a la comunidad de montes para plantar unos árboles en un terreno anexo al centro escolar. La experiencia debió resultar satisfactoria para unos y otros ya que ayer repitieron, y esta vez fueron los comuneros los que pidieron la ayuda de los alumnos, que se están convirtiendo en todos unos expertos en la materia, para repoblar un terreno.

Desde la diez de la mañana, los escolares llevaron a cabo un arduo trabajo bajo un sol de justicia del que esperan ver pronto los frutos. Y nunca mejor dicho, ya que entre las especies que plantaron hay cerezos y castaños.

Los primeros en ponerse manos a la obra fueron los mayores. Los alumnos de quinto y sexto curso escucharon atentamente las explicaciones que les dio el guarda forestal sobre las plantas, su cuidado y la importancia que tienen para la continuidad del ecosistema, aunque, como luego reconocía Manuel, que está en sexto, todo eso ya lo sabían.

A continuación tocó ponerse a trabajar. Por grupos y acompañados siempre de una persona mayor que les explicaba el procedimiento, los escolares se esmeraron en abonar y dejar bien sujetos sus árboles. Al grupo de Loreto, Manuel, Raquel y Amalia les explicaban que es importante no dejar piedras en torno a la raíz de la planta mientras, en el hoyo de al lado, un trabajador del departamento municipal de jardinería insistía en la importancia de echar abono antes de cubrir las raíces con la tierra.

Más arriba, Débora, de quinto curso, se afanaba en ampliar el agujero en el que debía plantar su árbol mientras sus compañeras Clara e Inés lo sujetaban y contaban su experiencia en la plantación del año pasado.

Así, a lo largo de toda la mañana, pasaron por el terreno destinado a la plantación más de un centenar de escolares que contribuyeron con otros tantos ejemplares a recuperar una superficie muy degradada.

Supervisando las operaciones se encontraban varios miembros de la comunidad de montes de Cespón, que ayudaban a los pequeños y les daban consejos para que la repoblación resultase un éxito. Les indicaban, por ejemplo, que procurasen que los árboles quedasen lo más alineados para que la máquina que luego se encargará de limpiar la maleza en la zona pueda trabajar sin dañar los ejemplares recién plantados.

Seguimiento

La idea de los responsables del centro educativo de Cespón es que los escolares se conviertan unos expertos, pero no solo en plantaciones, sino en el cuidado de los árboles en general. Su intención es dar continuidad a la actividad haciendo un seguimiento de la evolución de las diferentes especies. Los pequeños deberán cuidar las plantas, también realizarán labores de limpieza e incluso podrán colaborar cuando se lleve a cabo la poda de los ejemplares.

Aunque los alumnos realizaron una pequeña aportación, a la comunidad de montes aún le queda por delante una intensa labor, ya que en los próximos días plantarán unos 2.000 árboles de distintas especies en un área de 2,5 hectáreas.