El presidente de la Confederación Galega de Minusválidos (Cogami), Anxo Queiruga, criticó ayer la utilización que pueda hacerse de los discapacitados para explicar la necesidad de instalar una rampa de acceso al edificio de la sede de la Sociedad General de Autores y Editores. Anxo Queiruga recordó que la Ley obliga a que los edificios sean accesibles y, por tanto, apuntó que «se se fixo mal non é culpa nosa, dos minusválidos». El presidente de Cogami dijo tener la sensación de que se «utiliza la situación das persoas que van en cadeira de rodas o dunha persoa dependente para argumentar que o edificio queda ou non accesible; cando lles interesa se acordan da accesibilidade e cando non, miran para outro lado».
El presidente de la Confederación recordó que la accesibilidad no es sólo una cuestión de los discapacitados actuales: «Non olviden que calquera pode ter unha lesión puntual ou ter que levar unha escaiola durante un tempo concreto».
Anxo Queiruga quiso restarle gravedad a la solución aportada para garantizar la accesibilidad al edificio. «O edificio non quedou como estaba, non se axustaba e buscouse unha solución, pero non utilicemos aos minusválidos, porque a lei obriga a que o edificio sexa accesible». Queiruga dijo que lo ideal es que la puerta fuera al mismo nivel de la acera, pero «mellor unha rampa que unha escaleira». El presidente de Cogami considera que «tampouco pasa nada por perder unhas prazas de aparcamento e a xente non debe olvidar que estas actuacións non son solo para os que agora temos este problema, porque ninguén sabe cal será o seu futuro».
Supuesta infracción
El edificio que será la futura sede del Noroeste de la SGAE se construye en una parcela municipal de 3.900 metros. El inmueble comenzó a construirse en el 2006 y se prevé su inauguración para finales del próximo mes de octubre. El pasado abril se alerta al Concello de una posible irregularidad en la construcción del edificio. Concretamente, junto a la puerta de acceso al edificio por la rúa Salvadas se estaba construyendo una escalera y rampa. De acuerdo con el proyecto que el SGAE presentó en el Concello y para el que recibió licencia municipal, la puerta estaba a nivel del suelo, lo que permitía cumplir la normativa en materia de accesibilidad. Al elevarse la altura de la puerta, por un error en el cálculo de la cota, fue necesario colocar una rampa y una escalera de acceso. Estos dos elementos se colocaron sobre la acera, que queda sensiblemente reducida.
Ante la denuncia vecinal, el departamento de Rehabilitación analiza el tema y se acuerda mantener la ocupación de parte de la acera por la rampa y escalera y ampliar la acera recortando el espacio de aparcamiento. La Asociación de Vecinos As Brañas de Andrés quiere que recaiga una sanción sobre la SGAE y que la cuantía revierta en el barrio.
Por otro lado, el grupo municipal popular pidió la comparecencia de la concejala de Rehabilitación, Socorro García Conde, en el pleno municipal para explicar los hechos de esta supuesta infracción urbanística y aclarar los detalles de la solución que finalmente se aportó para garantizar el acceso al edificio por la rúa Salvadas. En el próximo pleno se debatirá la petición del Partido Popular, es decir, si la concejala comparece, lo que se daría en un siguiente pleno municipal.
El alcalde ya adelantó que el gobierno local, formado por el PSOE y BNG, aprobará dicha comparecencia que, en cualquier caso, será en un próximo pleno municipal.