Un tribunal europeo estudiará si son legales las listas negras

María Jesús Fuente Decimavilla
maría jesús fuente VIGO / LA VOZ

VIGO

Esquerda Unida denunciará la prohibición de entrar en el pleno municipal

30 nov 2011 . Actualizado a las 11:16 h.

Esquerda Unida llevará al Tribunal Europeo de Derechos Humanos las listas negras del Concello de Vigo para que estudie si se ajustan a la legalidad.

El grupo político tiene intención también de volver a denunciar ante el nuevo Parlamento español la forma de actuar del gobierno municipal, como hizo en la pasada legislatura. Entiende que se están vulnerando los derechos de la ciudadanía europea al escoger a las personas que pueden acceder a las sesiones plenarias.

«Si hay un problema de orden se puede suspender el pleno o desalojar a las personas que lo están provocando, pero no se debe dar por supuesto que pueden montar trifulca en base a unas listas o a conocer que determinadas personas trabajan en una u otra empresa», explica el coordinador de Esquerda Unida en Vigo, Rubén Pérez.

Su formación solicitará también que las sesiones plenarias se vuelvan a celebrar en el auditorio municipal, como se hacía en otra época, para que tenga cabida todo el público que desee presenciarlas.

El aforo del salón de plenos se ha ido reduciendo con el tiempo y las reformas. En la actualidad apenas cuenta con cincuenta asientos. De ellos, una parte suele estar ocupada por simpatizantes del PSOE quienes acuden puntualmente a cada cita, al margen del tema que aborde la corporación local.

Tales circunstancias provocan que los colectivos sociales que intentan asistir de vez en cuando para presenciar algún debate concreto se tengan que quedar fuera, al menos una parte de los miembros. «Quien tiene que decidir el aforo es la demanda social y el alcalde debe tenerla en cuenta a la hora de decidir el espacio», comenta Rubén Pérez, quien añade que cuando se permite la participación no hay algarabías, sino que estas se producen cuando se coarta la libertad de expresión.

Para el coordinador de Esquerda Unida, el alcalde debe entender que reside en una ciudad donde sus decisiones producen conflictividad social, como sucede en la actualidad con los trabajadores de las empresas concesionarias. Se da la circunstancia, dice, de tramitaciones que requieren urgencia, y que deberían tratarse como tal. De hecho, esta será otra de las exigencias del partido de Cayo Lara en Vigo. Su representante tiene intención de acudir a los plenos de ahora en adelante para comprobar la forma de actuar de los políticos locales.

La falta de diálogo del gobierno municipal no solo es denunciada por esta formación política, sino por otros colectivos que se han atrevido a criticarlo. Es el caso de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Vigo. Las buenas relaciones con el alcalde solo duraron el tiempo que tardaron los vecinos en lanzar su propia propuesta sobre la subida de los impuestos municipales para el próximo año.

A partir de ese momento, el diálogo fue en picado hasta el punto de no recibir el alcalde a sus representantes.

Por si esto fuera poco, el concejal socialista Santos Héctor Rodríguez tachó a los miembros de la Federación poco menos que de tragaldabas al declarar en una rueda de prensa que él no daba dinero para comilonas.

No es la primera vez que este edil hace gala de su poco talante democrático. Pese a ser el responsable de Participación Ciudadana, ya se enfrentó con la anterior junta directiva del movimiento vecinal.

El aforo del salón municipal de sesiones se redujo con las reformas

50

Número de asientos