El velero de lujo «Dwinger» repite escala en Vigo

VIGO

20 jul 2011 . Actualizado a las 11:49 h.

1Solo el palo es ya un espectáculo. 60 metros de pura tecnología que le permite prescindir de obenques y de estay y que soporta 540 metros cuadrados de vela. El Dwinger, construido hace apenas tres años, ya se está convirtiendo en asiduo de los veranos vigueses. Propiedad de un empresario holandés aventurero (y multimillonario), suele elegir Davila Sport para hacer escala en sus rutas entre su puerto base de Holanda y el Mediterráneo.

Del equipamiento de lujo (técnico y del otro) que tiene el barco, dice mucho el hecho de que el coste ronda casi el millón por metro de eslora. Si las cifras que se han publicado son ciertas, la factura total rondó los 40 millones de euros, en tanto la eslora es de 47 metros.

El misterioso propietario, al que parece que le gusta llevar personalmente el timón de vez en cuando, puede acomodar a numerosos invitados ya que, además de la suite privada, el velero dispone de 15 camarotes. El Dwinger tiene previsto partir el jueves, después de unos días de descanso y, sobre todo, de avituallarse a conciencia. Porque lo que sí se sabe es que al empresario y su tripulación les gustan muy mucho los productos de la ría de Vigo. Y a quién no.

Medalla de oro

2Emilio Castro, presidente de Pórtico, S.A., será este año el destinatario de la medalla de oro del Club Financiero, distinción que lleva parejo el nombramiento de socio distinguido.

Nacido en Celanova, emigró a Venezuela en los 50, donde una década más tarde creó su primera empresa, Almacenes Cortés. En el 67 cumplió el sueño de regresar a Galicia y adquirió Pórtico, firma que se había creado en Vigo un par de años antes.

Hijo adoptivo

3Otro al que se le quiere rendir homenaje, en este caso a propuesta del PSOE ponteareano, es la general de la Guardia Civil Manuel Ferreiro que, después de 43 años de servicio, acaba de pasar a la reserva. Consideran los socialistas que es uno de los «persoeiros vivos máis salientables do noso concello e o seu intenso traballo ao servizo dos cidadáns faino merecedor do recoñecento da corporación municipal». Proponen que se le nombre hijo adoptivo.

Comida de mujeres

4Es ya una tradición que el último día de las fiestas de Bouzas las mujeres del barrio compartan comida en la Zona Franca mientras, a escasos metros (en el Liceo), los hombres hacen lo propio. Claro que la de ellas es siempre más animada. Por haber hasta hay elección de reina. En este caso la adjudicataria de la corona fue Mercedes Pérez. Ángela Pedrosa y Pili Pereira fueron las damas de honor, en tanto Litucha Izquierdo fue nombrada embajadora de Bouzas en el exterior. En definitiva, un rato de diversión detrás del que están, entre otras, las manos de Ramona González, Elisa Veiga y Margarita Montenegro. El año que viene, más.