«Rectorao Maravillao»

VIGO CIUDAD

14 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Yo no sé quién ganará las elecciones al Rectorado de la Universidad de Vigo. Pero estoy seguro de que, en la investidura, actuarán las Mamachicho. Porque la campaña electoral ha alcanzado tintes tan grotescos que lo raro será escuchar el Gaudeamus igitur o el Canticorum jubilo. Mejor es ir preparando las maracas para entonar el Rectorao Maravillao.

Cuando cursaba yo en la Complutense mi doctorado en mus, camuflado bajo la licenciatura en Ciencias de la Información, había en Periodismo un partido estudiantil llamado Maldita Facultá. Su emblema era una bomba con una mecha encendida. Este grupo, ácrata y faltón, empapelaba el campus con sus carteles. Y, aunque contaban con mi voto, nunca llegaron a nada. La Universidad era una cosa seria.

Veinte años después, parece que el cachondeo es la norma. Maldita Facultá estaría hoy copando los cargos universitarios. Al menos, si el canon es la campaña electoral que vivimos en Vigo.

Ahí tenemos, por ejemplo, la campaña de +KBZA, con el gesto de señalarse la sien repetido sin descanso en todas las fotos. Acrónimo y guiño han sido diseñados por profesores de Publicidad. Lo que demuestra que la Universidad no va en vanguardia, sino muy por detrás de la sociedad. Porque lo primero es un remedo del ZP de hace seis años. Y, lo segundo, la campaña de la ceja de hace dos.

¿Y qué decir del emblema que Rei Zentolo ha diseñado para Salustiano Mato? Porque, bien mirado, solo le faltan la boina y las gafas de sol para ser idéntico al logotipo de Prada A Tope. Suponemos que el industrial del Bierzo estará preocupado por si bajan las ventas de botes de pimientos.

En lo del vídeo de la amante satisfecha ya es mejor ni entrar. Como, tampoco, en el despliegue de merchandising que, además de pins y bolígrafos, incluye gorras de béisbol. Suponemos que el deporte del bate pronto ocupará un lugar de privilegio en Lagoas-Marcosende.

Por si fuera pobre el espectáculo, Nova Universidade ha pagado vallas publicitarias, gracias a las que podemos apiadarnos de Jaime Cabeza, obligado a posar en una posición inverosímil.

Lo asombroso es que todo este show no es único de Vigo. En Santiago, un candidato tenía por mascota un pingüino. Y, en una universidad de Madrid, un catedrático decía tener el apoyo de Chuck Norris.

Lo más curioso, sin embargo, es que Vigo tiene en estas elecciones a dos buenos candidatos. Uno y otro darían un magnífico rector. Pero a ambos los han embarcado en un espectáculo impresionante. A la espera del resultado, vamos afinando las maracas.