El plan del litoral hace inviable el proyecto de Foster para Massó

J. Santos

VIGO

El bosque de Don Paco y su prolongación hacia la ballenera queda clasificado como zona protegida

13 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Las distintas protecciones que contempla el Plan de Ordenación do Litoral (POL) en Massó hacen inviable el proyecto de Norman Foster y ponen en entredicho la densidad residencial que pretende la promotora, que reivindica la validez de convenio urbanístico firmado con el Concello en el 2004 que le permitía levantar unas 750 viviendas en edificios de hasta cuatro plantas.

El plan protege el bosque existente, desde la llamada Finca de Don Paco hasta las proximidades de la ballenera. Se suman a esta protección la intermareal, la costera y la ecológica. Crea lo que denomina un corredor ecológico, una franja cuyo ancho no está determinado, que atraviesa la finca y que envuelve la laguna, que figura también como espacio hidrológico. El resto del ámbito queda grafiado como «mellora ambiental e paisaxística».

La normativa, aunque muy genérica, ofrece pocas posibilidades edificatorias. Permite para las zonas de A Barreira y Balea «crecementos residenciais unifamiliares desvinculados das funcións urbanas e rurais, incluindo as instalacións da estación depuradora existente». El objetivo es «integrar os baleiros como elementos xeneradores de trama ou estructura física e funcional, poñer en valor os elementos do patrimonio industrial existentes, minimizar a presión sobre o perfil acantilado e as praias da Congorza ou do Medio e das Colchas e mellorar deste modo a calidade escénica e ambiental deste lugar».

Ballenera

En la actualidad, la única edificación industrial de Massó protegida es la vieja factoría, construida en 1941. El nuevo plan de la Xunta incorpora la antigua nave de la anchoa, la ballenera y todas las construcciones existentes en A Congorza, en estado ruinoso.

La promotora del puerto deportivo y la urbanización de Massó había solicitado al Concello autorización para derribar la ballenera. El gobierno local la remitió a Patrimonio, dando lugar a una queja de la empresa, que argumentaba que no está protegida. La decisión del Concello impidió su derribo. El entonces concejal de Urbanismo, Mariano Abalo, se felicita por ello.

La protección de estas edificaciones afecta directamente a una de las propuestas estrella de Norman Foster, la construcción de un hotel con forma de un coco cortado a la mitad formado por cinco edificios, que estaba llamado a ser la referencia visual de Massó desde la ría.

Abalo valora positivamente el plan del litoral por lo que afecta a Massó. Considera que implica una importante restricción del proyecto residencial de Marina Atlántica.

Puerto deportivo

El plan no parece afectar al puerto deportivo, ya que contempla la posibilidad de construir instalaciones de este tipo en la costa. Abalo, sin embargo, entiende que el puerto no tendría sentido sin la urbanización anexa.

Massó no figura en el POL como una de las excepcionalidades que contempla el plan para lo suelos consolidados. Los grafiados en los planos quedan excluidos de la obligación de adaptarse a la nueva normativa.

Por lo tanto, el Plan Xeral tendrá que incorporar las directrices que marca el plan para Massó y será la Xunta la que informe cualquier actuación que se proyecte en la finca.