El nuevo hospital tendrá dos gerentes

VIGO

01 feb 2010 . Actualizado a las 11:42 h.

El modelo escogido por el Sergas para construir y financiar el nuevo hospital de Vigo será una novedad en Galicia. En todos los sentidos. Nunca un hospital público fue construido con dinero privado. Se trata de un modelo que aboca a tener dos gerentes para dirigir el centro. Uno se encarga de todo el aspecto asistencial, desde la programación de los quirófanos hasta la retribución del personal médico; y el otro, de gestionar el resto de servicios, desde la lavandería a las máquinas de comida.

Una unión de empresas privadas financiará y construirá el nuevo complejo de Beade. Serán una constructora, una financiera y una prestadora de servicios. Además de edificar y equipar en parte el centro, cobrarán un alquiler durante 20 años para que el Sergas lo utilice mientras ellas gestionan los servicios no clínicos, desde la limpieza hasta la lavandería, pasando por el mantenimiento o la seguridad. Todos esos servicios estarán en manos de la empresa privada, mientras la parte asistencial corresponde al Sergas. Así, por ejemplo, en una operación intervienen las dos partes. El socio privado es el dueño del quirófano,pero su uso (el personal, parte del equipamiento, el servicio que presta) corresponde al Sergas.

El modelo ya funciona mayoritariamente en los nuevos hospitales que Esperanza Aguirre ha puesto en marcha en la comunidad de Madrid. En vista de esa experiencia, hay voces críticas que ponen el acento en la descoordinación que puede llegar a suponer tener dos gerentes.

¿Quién decide?

¿Y si uno -el asistencial- dice que hace falta abrir todos los quirófanos durante 20 horas al día para reducir la lista de espera y el otro -que representa a los dueños de las instalaciones- se niega? ¿Y si el personal de la lavandería, que pertenece a la parte privada, se pone en huelga y esto afecta la parte asistencial por falta de ropa en las habitaciones? ¿A quién corresponde la última decisión? ¿Ante quién reivindican los trabajadores en caso de huelga? Lo que es cierto es que la empresa privada cede el uso del hospital al Sergas y se encarga de mantenerlo. Y tiene poder de decisión sobre las obras que se pueden hacer en el centro. ¿Qué pasa si hay una pandemia que obliga a hacer reformas -como sucedió en las ucis gallegas, por la gripe A-? Tal vez la empresa privada lo permita solo a cambio de más dinero. Y no será poco el que recibirá: en torno a 50 millones el primer año de puesta en marcha del hospital (2013) y subiendo según el IPC.

El Sergas debe hilar fino a partir de ahora. Tendrá que poner en marcha mecanismos de control. Pero es inevitable que haya cosas que se escapen, porque el contrato de construcción y explotación se firmará este año y lo que pueda suceder en los próximos 20 es imprevisible.