Líderes en construcción naval... también en miniatura

Soledad Antón soledad.anton@lavoz.es

VIGO

25 nov 2009 . Actualizado a las 02:45 h.

Lo cierto es que a las maquetas que hasta el próximo día 8 de diciembre pueden contemplarse en el Liceo de Bouzas no les falta un perejil. Detrás de cada una de las embarcaciones a escala hay muchas horas (años en algún caso) de trabajo.

La minuciosidad queda patente en cada detalle. Está claro que también en este capítulo el sector naval gallego está a la cabeza. En total pueden contemplarse un centenar de barcos de todos los modelos, épocas e incluso tamaños. Y es que no faltan los navíos embotellados.

Al timón de la iniciativa, que ya va por su tercera edición, está Amonaga, la asociación que aglutina a los forofos del modelismo naval. Según Joaquín Yarza, el ideador (que no el ideólogo) de la entidad, hay más de los que pudiera parecer. De hecho, no paran de sumar adeptos desde aquel 2005 en que a Joaquín se le ocurrió poner un anuncio para encontrar compañeros de entretenimiento. A la cita, en la playa de Samil, acudieron Pablo Vaamonde, Fernando Villar y Ventura Luaces. Hoy, cuatro años después, los nombres de los que se han ido sumando no caben en esta página.

En cuanto a la lista de navíos, supera los tres centenares. Le pregunto cuál es la joya de la corona y, como buen gallego, responde con el consabido «depende». Al parecer de lo que depende es si estamos hablando de ejemplares históricos, tradicionales, modernos, de última generación... Como sigo apretándole dice que, en todo caso, el visitante no puede dejar de detenerse en el Santísima Trinidad, una de las obras maestras de Moncho Vidal; o en el Bismarck, del mismo autor; o en el galeón de Luis Miguel López con las cuadernas al aire; o en la polacra española de Eulogio Neira; o el Juan Carlos, el Canarias...

Tal vez por pudor no menciona ninguna pieza salida de su taller. Como también en este punto le insisto, me habla de la copia del Roberto, el emblemático buque aljibe que prestó servicio en la ría de Vigo durante buena parte del siglo XX. Invirtió ocho meses de trabajo en reproducir cada detalle aquella traída de aguas marítima, desguazada hace ya una década y de la que apenas se conserva el motor, que guardan como oro en paño en un taller de Bouzas.

Todo ello, ya lo dije hace unas cuantas líneas, puede contemplarse hasta el próximo día 8 en el Liceo Marítimo. La muestra se completa con sendas charlas, la primera el sábado, a cargo de Manuel Pérez, y la segunda el día 5, a cargo de Juan Olivencia.

El más del centenar de abuelos que ayer acudieron a la llamada de ese autodenominado Grupo de Mayores de Telefónica que comanda Higinio Rey, superaron una de esas pruebas del nueve a las que los avances tecnológicos les someten, día sí y día también: descubrieron las posibilidades del móvil. No todas, claro, pero sí las cuatro fundamentales, de suerte que las ondas de baja frecuencia ya no tienen secretos para ellos. Se acabó lanzar eseoeses a los nietos para mandar un esemese o cambiar el politono.

No pudieron tener los entusiastas cursillistas mejores monitores. De hecho, llegaron expresamente desde la central de Movistar en Madrid para la clase que, además, incluía recomendaciones de uso para tiempos de crisis, es decir, un decálogo para ahorrar sin dejar de estar conectados.

Me cuenta Higinio Rey que esta no es más que una de las muchas actividades que organizan, porque no todo tienen que ser encuentros gastronómicos. De hecho, la asociación que preside tiene una vertiente social muy importante: visitan periódicamente a los antiguos compañeros que están ingresados en hospitales o, en su caso, en residencias geriátricas. También organizan conferencias, excursiones culturales y, por supuesto, comidas de confraternidad.

La comilona más numerosa siempre es la de Navidad, que este año está prevista para el próximo día 17. Suele aprovecharse dicha cita para homenajear al jubilado y a la jubilada de más edad.

Pocos hombres han repetido como destinatarios de dicho homenaje, que este año recibirá Gaspar Vivero. Sin embargo, en el apartado femenino la antorcha la porta desde hace trece3 años (con este serán catorce, claro) Concepción Salgado, que hace tiempo que cumplió los noventa pero que no está dispuesta a ceder el trono tan pronto. Felicidades anticipadas.