Santiago Domínguez reclama un consenso sobre el proyecto portuario al margen de la batalla política
10 jun 2009 . Actualizado a las 11:48 h.La ampliación de las instalaciones portuarias conforme al proyecto del arquitecto francés Jean Nouvel es cada vez menos probable. Pese a la encendida defensa del alcalde socialista Abel Caballero, padre de la iniciativa cuando dirigía el puerto, el rechazo de la actual presidenta, la popular Corina Porro, es igual de firme que el apoyo del primero. Por su parte, los nacionalistas reclamaron ayer por boca del teniente de alcalde, Santiago Domínguez, un consenso que se antoja casi imposible en estos momentos.
Carlos Font, número dos del PSOE, y el propio Abel Caballero, censuraron durante la mañana la intención de Porro de congelar el proyecto con excepción de la ampliación del muelle de cruceros. Para el alcalde es una iniciativa estratégica «que permitirá la gran transformación del borde litoral y lo considero irrenunciable».
En una línea completamente opuesta el PP difundió una nota al encontrarse de baja por enfermedad Corina Porro. Para los populares el proyecto es «una fantasía» y no dudan en calificarlo de «irrealizable». Desde su punto de vista «la megalomanía de Caballero lo llevó a plantearlo para hacer su campaña personal».
Ante dos puntos de vista tan opuestos de nada va a servir la llamada al diálogo de los nacionalistas. Domínguez es partidario de que no se tomen «decisións persoais» y que en la solución final participen el resto de las fuerzas políticas y sociales, algo que PSOE y PP no van a tener en cuenta. Nuevamente pide que con urgencia se elabore el plan de infraestructura y de ocupación de espacios.