Hace 50 años, tal día como ayer, la multinacional francesa Citroën depositó la primera piedra de la nave de Balaídos. El mayor centro de producción de coches de España y del grupo PSA Peugeot Citroën está de cumpleaños y lo celebra fabricando más coches, pese a un mercado en preocupante recesión (las ventas de furgonetas, un segmento prioritario para la planta de Vigo, cayeron en mayo un 32%); y abriendo sus herméticas puertas a los ciudadanos.
El director del Centro de Vigo, Pierre Ianni, lo explicaba ayer al afirmar que «este aniversario es una magnífica ocasión para estrechar lazos con la ciudadanía de Vigo». Ianni reconoció que los trabajadores gallegos tienen mucho que ver con el éxito actual. «La posición que hoy ocupa esta planta en el sector de automoción mundial es fruto del esfuerzo realizado durante medio siglo por generaciones de personas, en su gran mayoría vigueses y gallegos, que conforman la sociedad en la que nos sentimos profundamente enraizados», afirmó en un comunicado difundido por la dirección de la fábrica.
Dentro del programa de actos de celebración del 50 aniversario de Citroën en Vigo, la factoría ha organizado un plan de visitas guiadas que permitirá a cualquier persona que lo solicite conocer la planta en plena actividad. En los últimos años, el Centro de Vigo recibió unas 12.000 visitas anuales, principalmente de familiares de los trabajadores y estudiantes.
Visitas a la planta
Las visitas, con una duración estimada de 90 minutos, se realizarán semanalmente en grupos de 30 personas como máximo y consisten en una reunión en sala en la que se presentarán las principales características de la planta y en un recorrido guiado por los talleres de producción.