Caballero es incapaz ahora de dar una fecha para iniciar las obras del auditorio de Beiramar

VIGO

04 ene 2008 . Actualizado a las 12:46 h.

La crisis del auditorio-palacio de congresos de Beiramar se le ha ido de las manos al alcalde de Vigo. Después de sucesivas y reiteradas promesas de que el 2 de enero pasado se iniciarían las obras de construcción, Abel Caballero es ahora incapaz de explicar los motivos por los que no ha podido hacer frente a su compromiso ni tampoco se atreve a aventurar un nuevo plazo.

Todavía ayer el alcalde reconocía que la situación del proyecto «era más endiablada y más difícil de lo que creíamos, pese a lo cual hemos conseguido reducir sensiblemente la diferencia de precios» entre el coste del proyecto redactado por el arquitecto César Portela y el importe que se comprometieron a invertir los concesionarios, un conjunto de empresas encabezado por Caixanova y por la constructora Sacyr.

En el momento de la adjudicación la oferta ganadora aceptó un plan de inversión que cifraba el coste total en algo menos de 90 millones de euros, de los que una tercera parte iban a ser aportados por administraciones públicas, concretamente Xunta y Concello. La sorpresa se produjó el año pasado cuando poco antes de las elecciones Portela presentó un proyecto que preveía una inversión superior a los 150 millones de pesetas.

La consecuencia inmediata de esta disparidad fue la paralización del proyecto, que para entonces contaba ya con una explanada lista para construir el recinto cultural una vez derribada la antigua factoría de Casa Mar. La solución que puso en marcha Caballero en ese momento, a finales de junio del 2007, consistió en iniciar negociaciones a dos bandas con Portela y con las empresas concesionarias, tratando de casar las propuestas de ambos con una adjudicación municipal que ata de manos al Concello. Tras un par de meses de contactos, Caballero se mostró optimista y anticipó que el 2 de enero entrarían las máquinas a trabajar en el recinto de Casa Mar.

Rebaja sin explicaciones

Según se aproximaba la fecha el alcalde de Vigo dejó de hablar del tema, consciente de que el conflicto no se había resuelto. El único dato que se ha filtrado es que Portela habría modificado el proyecto a la baja, introduciendo cambios que permitirían construir un recinto por solo 122 millones de euros. Ayer el alcalde dio por seguro que este proyecto reformado «satisface a las partes», por lo que sus esfuerzos se dirigen ahora a «estudiar como financiamos un desfase de unos 35 millones de euros».

Aunque no quiere dar plazos, el alcalde mantiene su optimismo al asegurar que «se cumplirán los plazos». En todo momento Caballero ha responsabilizado a su antecesora en la alcaldía, Corina Porro, de los problemas que atraviesa el proyecto y de retrasar la noticia de que había un gran desfase económico.