Txomin Nagore, el superviviente regresa a Balaídos

Víctor López

VIGO

21 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Txomin Nagore Arbizu es a sus 33 años uno de los trotamundos de fútbol español. Es el típico jugador que siempre encaja pero al que no le han dado la opción de quedarse.

Salió de la cantera de Osasuna y como otros muchos navarros al poco de despuntar escuchó los cantos de sirena del Athletic de Bilbao. En su primer año en el equipo vasco lograron el subcampeonato de Liga en la temporada 1997-1998. Sin embargo, en la Catedral siempre fue discutido. A muchos no les gusta su fútbol tosco pero efectivo. Salió cedido al Numancia donde pasó una buena primera temporada. Nagore ha jugado los cuatro partidos de Liga en que los sorianos se han enfrentado a los celestes en las temporadas 1999-2000 y en la 2000-01. Tuvo entonces en su compañía del medio campo numantino a Pacheta, el ahora director deportivo del club de Los Pajaritos. En su primera etapa por Soria vivió un descenso que le llevó a las filas del Atlético de Madrid.

Con el club colchonero logró su primer ascenso a Primera. Bajó la batuta de Luis Aragonés rindió un gran Nagore. Se quedó un año más en el Manzanares pero ya no fue igual. De ahí vino su salto al Mallorca. En el club balear conoció a Perera, con el que luego coincidiría en el Celta. Ambos recalaron en el club vigués como cedidos y firmaron el segundo ascenso en sus respectivas carreras.

Fernando Vázquez confío a medias en él ya que Borja Oubiña tuvo en muchos partidos todo el medio campo y se prescindió del doble pivote. Pero llegó el momento de jugársela, y el medio centro vigués estaba lesionado. Nagore fue titular como pivote único ante el Xerez y el Lleida, en el doble ascenso vigués a Primera. El técnico de Castrofeito a pesar de eso, no renovó su confianza en el navarro que se marchó al Levante. Con el club valenciano firmó su tercer ascenso a Primera pero a pesar de eso, tampoco se quedó en tierras valencianas.

Entonces, escuchó la llamada del Numancia. Volvió a Soria para el que parece puede ser su retiro dorado. Esta realizando una temporada soberbia y la semana pasada hasta marcó ante la Real Sociedad. Va en busca de su cuarto ascenso. Aunque lo logre, da la sensación de que siempre será discutido. Sus números son arrolladores pero su trabajo de fontanería nunca ha sido reconocido.