Los arqueólogos empiezan a intuir que todo el barrio del Areal esconde una enorme salina romana del siglo I. El laboratorio donde se está fraguando esta teoría es el solar donde debería ampliarse la calle Rosalía de Castro, tal como se recoge en el Plan Xeral de Ordenamiento Municipal.
En la actualidad, un equipo de arqueólogos ha destapado tres nuevos estanques pertenecientes a un amplio conjunto que podría extenderse, hasta la calle Inés Pérez de Ceta, a lo largo de unos ochocientos metros de distancia. Las excavaciones se están realizando actualmente en la parte norte del solar, que linda con la calle Areal. El corte realizado por los arqueólogos permite ver como los estanques se suceden a unos dos metros de profundidad respecto al nivel actual del suelo. Aproximadamente, cada estanque tiene una superficie de 50 metros cuadrados, limitados por grandes piedras hincadas.
Estos descubrimientos están provocando la ralentización del proyecto urbanístico previsto para esta zona, que incluye la construcción de más de setecientas viviendas, un aparcamiento subterráneo y la apertura de la prolongación de Rosalía de Castro y la calle Miragaia.
Ante esta avalancha de hallazgos, la Consellería de Cultura ha ordenado nuevas excavaciones que irán analizando todo el subsuelo del mencionado solar en diferentes campañas. La Xunta no se ha marcado plazos porque éstos dependerán de la importancia de los propios hallazgos, que de momento son enormes.
Tres años paralizado
Ya hace tres años que la Dirección Xeral de Patrimonio decidió paralizar las obras de urbanización del solar al detectar indicios de la presencia de restos arqueológicos. Aunque el lugar se encuentra fuera del área municipal de cautela arqueológica, un informe del anterior técnico municipal de Patrimonio permitió que los vestigios del pasado vigués puedan ser estudiados en la actualidad.
Desde entonces, el departamento de Patrimonio Histórico de la Xunta todavía no ha liberado los terrenos correspondientes a toda la unidad de actuación urbanística, permitiendo únicamente a los propietarios de los terrenos la construcción de unos muros pantalla para separar las parcelas que constituyen este amplio solar.
Por debajo de esta ampliación de la calle Rosalía de Castro se construirá un aparcamiento subterráneo, cuya concesión municipal ha recaído recientemente en la empresa Puentes y Calzadas. Este solar ha sido dividido en quince parcelas, en donde el Concello de Vigo permitirá construir cerca de setecientas viviendas. Los diferentes edificios podrán ascender hasta las 10 u 11 alturas, dependiendo del solar. Este plan urbano conllevó la expropiación de varios inmuebles en la calle Areal, que fueron muy protestados por sus inquilinos.