El héroe celeste de la tarde, el goleador Yannis Okkas, se mostró tras el partido «contento con los goles, pero sobre todo con la victoria». De hecho muestra su humildad al no ponerse objetivos personales sino de grupo: «No quiero marcar una cifra determinada de goles, lo que deseo es que el equipo sume muchos puntos para conseguir el ascenso. Yo estoy para ayudar», declaró.
Debutó además por la puerta grande en Balaídos, donde aún no había tenido la ocasión de estrenarse: «Es bonito empezar así en casa». Tuvo palabbras de agradecimiento para la afición.
De todas formas el chipriota asegura que no le gusta «el papel de líder del equipo» sino que su deseo es «disfrutar con mis compañeros jugando bien al fútbol» y cree que el Celta puede conseguirlo porque en cada partido se van encontrando mejor a medida que se onjuntan: «Vine a un gran equipo y poco a poco vamos mejorando».