Los coches de antes del 92 y diesel «sucios» estarán vetados en las zonas de atmósfera protegida

EFE

SOCIEDAD

Según el Plan de Mejora de la Calidad del Aire, cinco adhesivos diferentes identificarán a los vehículos según sus emisiones contaminantes.

04 nov 2011 . Actualizado a las 20:46 h.

Todos los coches anteriores a 1992 y los diesel más contaminantes tendrán prohibida la entrada a las futuras zonas de atmósfera protegida (ZUAP) de las ciudades, que deberá delimitar cada ayuntamiento. Así lo plantea el Plan de Mejora de la Calidad del Aire aprobado hoy en el Consejo de Ministros, que define las ZUAP como áreas urbanas o metropolitanas, acotadas espacialmente para aplicar una serie de medidas, la mayoría de ellas sobre el tráfico rodado para reducir la contaminación.

La principal herramienta para la gestión de las ZUAP es el etiquetado de los vehículos por el Ministerio de Industria, clasificado en cinco categorías según sus emisiones contaminantes.

Por orden de grado de contaminación, se encuentra en primer lugar el adhesivo rojo, en forma de hoja y numerado con el 1; a continuación se sitúa el naranja (número2); el amarillo (3), el verde (4) y el adhesivo verde con el número 4+. Este último corresponde a los vehículos híbridos, híbridos enchufables, gas y eléctricos.

Una vez identificados los vehículos en el ámbito nacional y desarrollada la legislación pertinente que permite a la administración local crear los ZUAP y limitar el acceso en ellas de los más contaminantes, el propio ayuntamiento diseñara y elegirá el nivel de restricción y las fases de aplicación. Según el plan, se podría aplicar una primera fase a partir de 2013 y otras posteriores en 2014, 2016 etcétera.

Las medidas para las ZUAP serán de «obligado cumplimiento» , entre ellas la limitación permanente del acceso de los coches más contaminantes y la gestión del aparcamiento, que habrá de ser regulado con distinción tarifaria entre residentes y no residentes.

El documento del Ministerio de Medio Ambiente apuesta asimismo por estudiar el uso del etiquetaje en motocicletas, que en ciudades como Barcelona representan más del 10 % de las emisiones de nitrógeno de oxigeno y partículas PM10.

Por otro lado, el Plan plantea la limitación de la velocidad máxima de circulación en la periferia de las ciudades, por medio de un sistema de velocidad variable según el cual durante las horas de máximo tráfico la máxima permitida se reduce y en las horas con menor tráfico (mediodía y noche) se vuelve a aumentar. Esta media, según Medio Ambiente, favorece la reducción de las emisiones de los motores por el menor consumo de combustible, a la vez que se logra una disminución de la cogestión del tráfico en la entrada de la ciudad, con menor alternancia de paradas ya arranques. Asimismo, se propone aplicar limitaciones de acceso espaciales y temporales para determinados vehículos durante episodios de contaminación.

El Plan, que consta de 90 medidas y casi 200 páginas, plantea también la elaboración de una guía metodológica para la correcta ubicación de estaciones de medida, y de un protocolo de actuación para a la hora de reubicar estaciones. Incluirá criterios homogéneos que permitan identificar de forma clara y transparente las causas de la reubicación de las estaciones.

Su localización será revisada como mínimo cada cinco años y siempre que concurran circunstancias que así lo justifiquen.