La firma textil, especializada en prendas de diseño actual a buen precio, abre sus tiendas al lado de las del grupo gallego
21 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Las tiendas parecen una clonación de las de Zara, ofrecen prendas similares basadas en diseño actual a buen precio y hasta el uniforme de las vendedoras se asemeja. Se llama Zarina, pertenece a Melon Fashion Group y opera en Rusia, donde no solo desdeña los caracteres cirílicos para promocionarse, sino que usa además una tipografía similar a la de la firma gallega en su marca comercial.
En las principales metrópolis del país ha abierto ya más de 90 tiendas propias y franquicias que compiten puerta con puerta con las 135 que tiene Inditex (de las que 35 son Zara), porque en ocasiones las sitúa estratégicamente junto a las instalaciones del grupo coruñés. Por ejemplo, junto a un Stradivarius en uno de los principales centros comerciales de Moscú.
«La ropa es igual; el precio, también; la iluminación, calcada, y el estilo apenas se diferencia», resume el gallego Luis Gutiérrez, que visita Moscú con frecuencia y que apenas observa diferencias en el estilo. «Bueno, tal vez tenga algo más de calidad la ropa de Zara -concede-. Zarina es todo made in China».
En la firma gallega, que conoce bien el asunto, no quieren ni oír hablar del tema. «Sí, sabemos de este caso, pero no vamos a hacer declaraciones», atajan los responsables de prensa.
Zarina es un ejemplo radical de transformación de un sistema productivo en pocos años. El proyecto nació en 1993, cuando la fábrica ZAO Pervomayskaya Zarya, que durante décadas uniformó de gris a la mujer soviética, decidió entrar en el mercado de la moda para transformarse en una brutal maquinaria capitalista que produce ropa de consumo rápido como rosquillas. En 1998 introdujo las prendas de punto, y en el 2000, los pantalones. Hasta el 2001 no se registra oficialmente la marca Zarina y hasta el 2004 no empieza su verdadera expansión, con la aparición de diferentes líneas de ropa (Zarina Collection, Zarina Accesories) y su fusión con su matriz, Melon Fashion Group (la antigua ZAO).
Con este gigante de la moda rusa ha alcanzado la catalana Cortefiel un acuerdo de colaboración que le permitirá introducirse en el floreciente mercado moscovita.