Un joven de nacionalidad rumana que lleva un lustro en el municipio podría ser, según los vecinos, el agraciado con los 7,7 millones de euros de la primitiva
05 oct 2009 . Actualizado a las 02:00 h.«¿A quen lle tocou?». Fue la pregunta más repetida ayer en Silleda. No era para menos. Uno de los dos acertantes con el primer premio de la lotería primitiva del sábado había sellado en el Café Lago su boleto, el otro fue en Barcelona, y se embolsará más de 7,7 millones de euros. El abanico de posibles agraciados es muy amplio. El bar es zona de paso al pie de la N-525, y, además, estos días los opositores llenaron la localidad y realizaron sus apuestas.
Algunos, que habían sellado su boleto en el bar y desconocían la lluvia de millones, miraban con timidez el papel para comprobar si eran ellos a los que había sonreído la fortuna y guardaban en su cartera la combinación formada por los números 3, 20, 27, 35, 42 y 47, por la que correspondían 7.759.632,54 euros.
El deseo general compartido era que tocase a alguien silledense. Pero pronto las especulaciones sobre el posible ganador del cuantioso premio comenzaron a extenderse. El que más peso tomó y al que situaron más voces como el nuevo millonario es un joven vecino de nacionalidad rumana de unos 27 años. Llevaría, según apuntan, unos cinco años en el municipio, donde también tiene varios familiares, aunque en estos momentos trabaja fuera de Galicia. El premio pudo haberlo conseguido gastando únicamente dos euros en su apuesta. Era el comentario más extendido y con amplio eco entre los numerosos residentes de esta nacionalidad, y que corrió como la pólvora.
Jugar al despiste
Sin embargo, conforme fue avanzando la jornada, el supuesto agraciado fue indicando a quienes le preguntaban que solo le habían correspondido 2.400 euros, al tener únicamente cinco aciertos. «Pronto se vai saber se lle tocou ou non», decían algunos, que ya auguran la marcha de este joven del municipio. Pese a todos los rumores del posible ganador, desde el Café Lago explicaron que nadie se había presentado con su boleto agraciado. «Ninguén veu por aquí», aseguraba su titular, María del Carmen Castro Lago. Pero claro que tampoco sorprendió que, dada la cuantía del premio, el agraciado intentase mantenerse en el anonimato. El sábado por la noche, tras conocer que había repartido el premio, Carmen hizo a mano un cartel: «Que sepan e que vaian ingresar o boleto no banco», afirmaba la responsable del establecimiento hostelero.
Fue el premio más grande repartido en el Café Lago, de Silleda, donde ayer se respiraba ambiente festivo pese a la ausencia del ganador para poder abrir junto a él una botella de champán. Carmen Castro lleva con el despacho de apuestas más de medio siglo. Y el premio más grande que recuerda había sido en pesetas y rondaba los cinco millones. Nada comparable al actual. Entre tanta expectación, había quien se lamentaba de, tras muchos años jugando, no haber sido el agraciado. «Agora xa non se lle pode botar a culpa á máquina», indicaba Carmen. Y es que las miradas parecen estos días querer posarse todas en Silleda. Referencia para los opositores y también en política por la anunciada moción de censura, la fortuna tampoco quiso ser ajena.