La UE certifica que el agua de las playas gallegas es apta para el baño

SOCIEDAD

Un análisis de la Consellería de Sanidade determina que las aguas de Ares no reúnen las condiciones necesarias

12 jun 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Las aguas costeras de Galicia son aptas para el baño, ya que cumplen con los requisitos mínimos fijados por la Unión Europea. Así lo certifica el informe presentado ayer por la CE que ha elaborado la Agencia Europea de Medio Ambiente a partir de los análisis oficiales aportados por los propios gobiernos coincidiendo con la temporada de baño.

Coincidiendo con el informe de la UE, la Consellería de Sanidade comunicó ayer al alcalde de Ares, Julio Iglesias, que la playa central de la villa, en la comarca de Ferrolterra, no es apta para el baño, después de haber realizado las correspondientes analíticas. El Gobierno gallego realizará un contraanálisis el lunes para volver a confirmar la situación, el Ayuntamiento ha encargado uno propio hoy mismo.

Si la mayoría de playas de la comunidad son la cara de la moneda, la cruz se localiza en los ríos y lagos. Los análisis comunitarios han localizado dos puntos negros en dos tramos del Tea, uno localizado a su paso por Ponteareas y otro por Mondariz, en donde no se cumple con los requisitos mínimos exigidos por la legislación europea. Este suspenso, sin embargo, no significa que la situación no se haya subsanado en la actualidad, ya que los análisis utilizados para el informe se realizan con varios meses de antelación.

En cualquier caso, España, aparte de los dos focos detectados en el Tea, solo presenta otro borrón en el río Anduña, en Navarra.

En general, los ríos y lagos de España experimentaron una mejora considerable con respecto al año anterior, ya que el 93,5% respetaron los niveles de calidad, un 6,2% más que en 2007. A pesar de ello, no se permitió el acceso de bañistas a cuatro ríos españoles y dos embalses.

Baja la máxima calidad

En cuanto a la situación de las playas gallegas, la positiva evaluación general tampoco oculta algunas sombras que le impiden alcanzar la máxima calificación. Si se atiende al criterio de máxima calidad o excelencia, el porcentaje de playas gallegas que han recibido esta catalogación por parte de la Unión Europea, alrededor de un 73%, es inferior a la media española, que se sitúa en el 83,4%. Y no solo eso, sino que el estándar de excelencia viene experimentando un progresivo, deterioro, aunque no excesivamente acuciado, desde los últimos años.

Parte de la explicación de esta situación puede encontrarse en el mayor número de muestras de agua que se analizan en Galicia con respecto al resto de España, ya que los 1.899 exámenes que se practicaron en el conjunto de España, más del 25%, un total de 483, se hicieron en Galicia.

La situación en España en este apartado es ligeramente mejor a la del año anterior, ya que el agua del 99,4% de las zonas de baño costero cumplen con los requisitos mínimos exigidos, una cifra tres puntos por encima de la media comunitaria. Solo cuatro arenales incumplieron los requisitos de calidad -Port de Sóller y Son Moll (Baleares), Toña (Vizcaya) y Oribarzar (Guipúzcoa)-, lo que supone trece menos que el año anterior.