Un virus letal en México, pero mucho menos virulento en el resto del mundo

SOCIEDAD

¿Por qué la misma cepa tiene un impacto diferente?

30 abr 2009 . Actualizado a las 14:01 h.

¿Cuántas personas han muerto por la ahora llamada nueva gripe? Realmente no se sabe, pero poco a poco se va conociendo que la disparatada estadística inicial presenta notables matices. De las 159 muertes sospechosas en México, el país de donde surgió el brote, la Organización Mundial de la Salud (OMS) solo ha confirmado que siete óbitos están relacionados con el virus de origen presuntamente porcino.

La mortalidad, sin embargo, ha traspasado fronteras tras la confirmación ayer de la muerte de un bebé de 23 meses en un hospital de Houston (Estados Unidos), país en el que se han confirmado hasta 64 casos sospechosos. Sería el primer óbito ocurrido fuera de México, solo que el niño era mexicano y muy probablemente se contagió en este país. La alarma inicial por este suceso también se relaja por un hecho bien conocido: los niños, al igual que los ancianos y los enfermos, son los más expuestos y vulnerables a las gripes, tanto a la común como a la nueva, porque o bien su sistema inmune no se ha desarrollado o bien está debilitado. Este fallecimiento, según los expertos, entra dentro de lo esperado.

Síntomas moderados

Lo que sí existe es una notable diferencia entre la gravedad de los casos ocurridos en México y los confirmados hasta ahora en el resto del mundo, tanto en España como en Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania, Australia, Canadá, Israel o Nueva Zelanda. En todos estos países, los enfermos confirmados reaccionan favorablemente a la medicación y su evolución es muy favorable. En España, de hecho, los dos enfermos de Castilla-La Mancha se encuentran en perfecto estado y de no ser porque se trata de un virus nuevo habrían sido dados de alta. Los síntomas de los pacientes son más moderados e incluso leves que los detectados en México.

Condiciones sanitarias

¿Por qué es más mortífero el virus en México? No existe una respuesta única, pero, a falta de conocer nuevos detalles, los expertos ya esbozan algunas hipótesis. La primera apunta directamente al propio sistema sanitario mexicano, donde las infecciones hospitalarias constituyen la tercera causa de mortalidad y donde el 70% de los gastos de la sanidad pública del país se dedican a combatirla. «El distrito federal, donde se han dado la mayor parte de los casos, tiene más de veinte millones de personas y muchas viven en condiciones infrahumanas y malas condiciones higiénicas, con lo que cualquier situación sanitaria negativa les incide de forma más importante», señala Vicente Domínguez, responsable del área de salud pública del Complejo Hospitalario Universitario A Coruña.

Más tiempo en México

Pero esta razón por sí sola no es suficiente. Otra razón de peso la supone el hecho de que la enfermedad lleva más tiempo circulando en México que en otros países y que no se advirtió a tiempo, ya que en las fases iniciales pudo haber sido confundida con una gripe común. «Quizás decenas de miles de personas tienen o tuvieron síntomas de gripe en Ciudad de México, pero no lo comunicaron porque se percibió como una epidemia anual de gripe que estaba atacando con fuerza», corrobora James Koopman, epidemiólogo de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Míchigan. Este retraso significa que los enfermos no pudieron ser tratados a tiempo con antivirales como Tamiflu o Relenza, que son realmente eficaces cuando se suministran al sufrir los primeros síntomas del mal, pero no tanto después. En España, por ejemplo, el sistema de identificación temprana está funcionando y a los enfermos se les ha tratado de forma adecuada desde el primer momento.

¿Es otra variante?

En principio se había pensado que la cepa mexicana era más virulenta porque la variante del virus era diferente a la de otros países. Sin embargo, el Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos secuenció el virus mexicano y confirmó que se trataba de la misma variante que la estadounidense.

Descartada esta hipótesis, los expertos consideraron la posibilidad de que la severidad del brote mexicano podría deberse a algún factor geográfico específico, como algún patógeno que circule por la comunidad que hubiese agravado la cepa inicial. La sospecha está ahí, pero tampoco se ha confirmado.

Tasa de mortalidad

Pero, pese a que en México el virus ha sido más virulento que en otros países, su tasa de mortalidad, de momento, no difiere mucho del de la gripe común.