Los gallegos compran antigripales sin atender a sus síntomas

A CORUÑA CIUDAD

26 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La gripe llama cada año a las puertas de nuestra casa y cada año la afrontamos de la misma manera: algo de precaución, algún remedio natural y, al final, visita a la farmacia en busca de un medicamento que nos quite los síntomas porque curar, ya se sabe, la gripe no se cura con nada. Lo curioso es que elegimos el producto en función de nuestras preferencias y no de los síntomas, a pesar de que cada vez hay mayor especialización de los fármacos.

Ariana Fernández Palomo, farmacéutica de A Coruña, explica: «Normalmente la gente viene a buscar un fármaco para la gripe, en general, pero para eso lo mejor es que nos pregunten. En función de sus síntomas, les aconsejaremos lo que mejor se adapte a sus necesidades».

Muchas molestias distintas

Sus necesidades pueden ser varias: malestar general; dolor de cabeza o de oídos especialmente; estornudos y moqueo; tos irritativa, o dolor de garganta.

Para el primer caso están los complejos mixtos que tienen como principio activo básico bien el paracetamol o el ácido acetilsalicílico; con estos componentes hay varias modalidades que se diferencian entre sí en el tipo de analgésico y en la cantidad de antihistamínico que ofrecen (es decir, los principios activos que palían los síntomas de la alergia). Lo malo de estos compuestos es que los analgésicos pueden producir un aumento de los síntomas nasales y los antihistamínicos tienen un efecto sedante. Por eso debe ser el farmacéutico el que recomiende cada producto, si bien en general, explica Fernández Palomo, se puede decir que el Frenadol es bueno contra la tos y la Couldina para los estornudos.

Si lo que se tiene es dolor de cabeza, lo mejor es tomar un complejo de dos analgésicos (Actron tiene paracetamol y ácido acetilsalicílico) y si, en cambio, el punto débil son los oídos, una recomendación habitual es la del ibuprofeno (en sales, que son mucho más rápidas, tipo Espidifen o Stada) porque tiene un componente antiinflamatorio, o un paracetamol muy potente, como Efferalgan (1 gramo de paracetamol frente a los 600 miligramos de los compuestos más potentes).

La tos, lo más difícil de quitar

La tos irritativa, dicen los farmacéuticos, es uno de los síntomas más difíciles de erradicar por persistente y molesta. El dextrometorfano es el componente al que más se recurre para eliminarla, aunque es cierto que puede tardar semanas en desaparecer. En cambio, si con la tos hay congestión nasal lo mejor, dicen los expertos, son los antihistamínicos, aunque adormecen un poco y eso es algo que hay que valorar. Finalmente, si la tos no es seca, sino que proviene del pecho, lo que exige es un expectorante (la guaifenesina o la carbociesteina, por ejemplo) para licuar el moco y que este desaparezca.