Tecnología para el año nuevo

Javier Pedreira, «Wicho»

SOCIEDAD

Los consumidores tienen cada vez más y mejores opciones para adaptarse a la vida digital; móviles, ultraportátiles y dispositivos multimedia serán las estrellas del 2009

05 ene 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Vaya por delante que cuando Apple presentó el iPod original, allá por octubre del 2001, mi primera impresión fue la de que nadie en su sano juicio iba a comprar un reproductor de MP3 de 5 GB por unos 600 euros y que Steve Jobs y su equipo iban a acabar con la empresa al sacar un producto como ese.

Así que a estas alturas, con más de 150 millones de unidades vendidas y convertido el iPod en un icono cultural como en su momento lo fue el Walkman de Sony, creo que mis dotes predictivas han quedado claramente en entredicho, pero aún así voy a atreverme a mencionar aquí algunas de las tendencias en tecnología que creo que serán importantes este año.

Ya hace algún tiempo que los ordenadores portátiles suponen un volumen de ventas en dinero superior al de los de sobremesa, pero en el último trimestre del 2008 los portátiles sobrepasaron también a los de sobremesa en número de unidades vendidas, aunque por un margen escaso.

Esto es atribuible en buena medida al éxito de los ordenadores ultraportátiles, que por un precio de unos 300 euros ofrecen una máquina perfectamente capaz de satisfacer las necesidades de un usuario medio en cuanto a gestión de correo electrónico, navegar por Internet, ofimática, e incluso algo de tratamiento de fotos a un nivel medio.

Es de suponer que esta tendencia se mantenga en el 2009 y que cada vez más fabricantes entren en el mercado de los netbooks, lo que siempre nos dará más opciones a los compradores.

Móviles en evolución

Este año verá también cómo llegan a España los móviles basados en Android, el nuevo sistema operativo de Google, que se unirán al iPhone y otros teléfonos avanzados similares en la lucha por hacerse un hueco en el mercado.

Aquí la piedra angular estará en la facilidad de uso de estos terminales, que por primera vez están muy cercanos a la promesa de poderse convertir en el único gadget que uno pueda necesitar la mayoría del tiempo al combinar teléfono, agenda, cámara y reproductor multimedia en un solo cacharro.

Otra consideración importante será que la combinación de características satisfaga a cada usuario, ya que ninguno de ellos es perfecto y todos suponen aceptar un compromiso u otro.

De todos modos, creo que no es descabellado predecir que el iPhone seguirá marcando el camino a seguir en cuanto a facilidad de uso durante un buen tiempo, y de hecho cada vez más fabricantes están sacando al mercado modelos claramente enfocados a competir con aquel.

Será curioso también seguir observando cómo se van desdibujando las líneas entre teléfono móvil y ultraportátil, al menos en cuanto a su capacidad de proceso y almacenamiento, pues de hecho ya hay en el mercado móviles con más capacidad de la que tienen algunos de estos portátiles.

«Movicuidad»

La disponibilidad de dispositivos cada vez más avanzados que uno puede llevar encima todo el día hará también que cada vez demandemos más el poder disponer de una conexión a Internet en todo momento para poder consultar cualquier cosa que se nos pase por la cabeza, por lo que, a pesar de que las tarifas todavía tienen que mejorar mucho, aumentará mucho el uso de Internet móvil a través de las redes 3G, ya sea mediante módems USB conectados al ordenador o mediante teléfonos con este tipo de conectividad.

Al poder consultar cualquier tipo de información en un momento dado se unirá también en este consumo móvil de la información el fuerte impulso que están teniendo el uso de redes sociales y sistemas de lifestreaming como FriendFeed, que permiten seguir la actividad de amigos y contactos en múltiples servicios como Twitter, FaceBook, Tuenti o Flickr de una manera fácil y cómoda.

Eso sí, muchos de estos servicios, y en especial las redes sociales, tendrán que preocuparse de irse buscando un modelo de negocio que les permita sobrevivir en el mercado.

Entretenimiento audiovisual

Durante el 2009, en España oiremos hablar hasta la saciedad de la Televisión Digital Terrestre, ya que a mediados de año comenzará el proceso de apagado de la señal analógica por fases, con lo que quienes no hayan adaptado sus instalaciones al nuevo tipo de transmisión se quedarán sin poder verla una vez que se produzca el apagón analógico allá donde viven.

La previsión es que este proceso esté terminado el 3 de abril del 2010, pero puede que la cobertura de la nueva señal no llegue al 100% de la población en esa fecha, y hay serias dudas de que los todos los telespectadores hayan adaptado sus instalaciones y equipos para entonces.

Puestos a realizar esta adaptación una opción muy interesante puede ser la de los decodificadores de TDT que incorporan un puerto USB al que se puede conectar una tarjeta de memoria o un disco duro con películas en formato digital para poder verlas en la televisión, pero, dada la disponibilidad de contenidos en formato digital de fácil obtención a través de Internet, es muy posible que lo de la TDT vaya a ser una idea que se haya quedado obsoleta antes de estar implantada.

Y es que uno de los regalos más populares de las Navidades del 2007, y probablemente del año pasado, fueron los discos duros multimedia, unos dispositivos que se pueden conectar al ordenador para volcar en ellos contenido como música, películas, series, etcétera, y luego verlo en el televisor.

Los modelos más recientes, además, se pueden conectar al ordenador vía wifi, con lo que ni siquiera es necesario andar enchufando y desenchufando cables.

Un disco de estos y unas descargas bien programadas es lo más parecido que puede haber hoy en día a la televisión a la carta, le pese a quien le pese.

Me quedan muchas cosas que no caben, pero no quería dejar de mencionar la convergencia que se está produciendo entre las réflex digitales de gama alta y las cámaras de vídeo, ya que algunos modelos de réflex son ya capaces de grabar vídeo en HD, con lo que por fin las buenas cámaras de fotos harán buenos vídeos y se frenará un poco -espero- la alocada carrera de los megapíxeles.

Por cierto que un buen regalo de última hora puede ser una o varias tarjetas de memoria, a precios ridículos aún a pesar del canon digital.