Un oso muere atropellado por un tráiler en la A-6, cerca de Pedrafita

Fernanda Follana / Dolores Cela

SOCIEDAD

El cadáver del animal se trasladó a Valladolid y servirá para un estudio sobre la presencia de la especie en la zona

29 oct 2008 . Actualizado a las 12:01 h.

Un oso de más de cien kilos de peso y aproximadamente 1,80 metros de altura erguido murió a primera hora de la mañana de ayer arrollado por un tráiler, en la A-6, a la altura del kilómetro 417, en Trabadelo (León). El animal fue alcanzado sobre las seis, cuando transitaba por el viaducto de Puente Tréveda, a unos cuatro kilómetros de Pedrafita. El conductor del camión, que sufrió únicamente desperfectos en el parachoques derecho, pensó que se trataba de un jabalí de gran tamaño y dio aviso a la Guardia Civil. Cuando se bajó de la cabina, pudo comprobar que se trataba de un plantígrado y que ya estaba muerto.

Todos los indicios apuntan a que el oso pudo haber accedido a la autovía por el ramal de Trabadelo, que es el más próximo. Personal de la empresa que realiza la conservación de esta vía examinó las vallas de protección para determinar si existían pruebas de que pudiera haber traspasado la cerca. No encontraron ningún tramo roto. El animal, con su envergadura, podría haber entrado derribándola, ya que no se trata de una alambrada de protección cinegética, sino de una malla que delimita la propiedad de Fomento.

Si se confirma que el plantígrado accedió a la A-6 por Trabadelo, caminó un trayecto de unos 800 metros por la A-6 hasta que fue alcanzado por el tráiler.

El animal fue trasladado por personal de la empresa que tiene asignado el mantenimiento de la A-6 en ese tramo hasta su nave de Pedrafita do Cebreiro, después de que interviniera la Guardia Civil de Tráfico.

Hasta la nave de Pedrafita se trasladaron miembros de la Fundación Oso Pardo, que se hicieron cargo del cadáver. Lo trasladaron a Valladolid, donde será sometido a diferentes exámenes que aportarán datos sobre la presencia de esta especie en la zona. Según la Fundación Oso Pardo, se trata del primer caso confirmado de un ejemplar muerto en un atropello.