Más de la mitad de los escolares solo hacen ejercicio físico en el colegio

Alejandro Posilio

SOCIEDAD

Un estudio revela que los adolescentes que practican más deporte tienen un mejor rendimiento académico

11 abr 2008 . Actualizado a las 12:34 h.

El paulatino descenso de la actividad física por parte de niños y adolescentes, que se ha extendido durante los últimos años a las horas de educación física en las escuelas, ha provocado que el 17% de los jóvenes de entre 9 y 17 años acumulen porcentajes de grasa corporal considerados altos, y otro 35%, los tengan moderadamente altos. Estas circunstancias hacen que toda esta población sufra el riesgo de padecer enfermedades como obesidad, hipercolesterolemia, diabetes tipo II y cáncer de colon, entre otras.

Los datos figuran en el estudio La educación física, los estilos de vida y los adolescentes; cómo son, cómo se ven, qué saben y qué opinan, realizado por la Universidad Autónoma de Madrid y presentado ayer por el doctor Juan Luis Hernández, catedrático de Actividad Física y Deportes de dicho centro universitario. El responsable de este trabajo resaltó que el panorama que ofrece el estilo de vida de los escolares es «preocupante», ya que un tercio de ellos realizan con insuficiente frecuencia una actividad física y casi la mitad están es situación de riesgo de padecer sobrepeso.

Los datos son concluyentes, pues a partir de los 15 años, y especialmente entre las chicas, el porcentaje de los escolares que nunca realizan una actividad física fuera de las clases de gimnasia supera el 50%. «Esta población se encuentra muy alejada de la recomendación de organismos internacionales para estas edades, respecto a la necesidad de mantener al menos una hora diaria de actividad física con cierta intensidad», manifestó el doctor Hernández.

Las consecuencias de este estilo de vida sedentario se están reflejando en la respuesta del organismo ante la realización de determinados esfuerzos físicos. Así, el estudio refleja un déficit grave de adaptación cardiorrespiratoria de los escolares; es decir, que cuando hacen algún ejercicio, su frecuencia cardíaca sube demasiado y no son capaces de reducir sus pulsaciones a un nivel normal. Esto es lo que hace que los adolescentes sientan la práctica de la actividad física como un «sacrificio», lo que provoca una tendencia al abandono, que origina una peor capacidad de adaptación, entrándose así en un círculo vicioso que genera un estilo de vida sedentario.

El estudio también ha detectado una deficiente flexibilidad corporal en estos jóvenes, pues un 45% de los escolares entre 9 y 17 años no llegan a tocarse los pies con los dedos de las manos, lo que en un futuro les provocará a una gran parte dolores de espalda.

Niños más gordos

«No es extraño que los niños y adolescentes estén cada vez más gordos. Y lo que realmente está contribuyendo a una población cada vez más obesa es la falta de actividad física. Por tanto, la primera sugerencia para las autoridades educativas es que, siguiendo las recomendaciones del Consejo de Europa, se incrementen al menos a tres las horas de clase de Educación Física a la semana», señaló el coordinador del estudio.

Es más, el informe resalta que han podido comprobar que los adolescentes que practican más actividad física tienen un índice de autoestima más elevado y una mejor percepción de su propia competencia. «Todo esto repercute positivamente en su rendimiento académico y en el de su vida diaria», sentenció el catedrático Juan Luis Hernández.