La Xunta encarga un videojuego infantil para frenar el sexismo

M. Cheda

SOCIEDAD

18 ago 2007 . Actualizado a las 03:10 h.

santiago | La Xunta producirá, editará y distribuirá entre la población infantil un videojuego de ordenador con el objetivo de combatir el sexismo. El producto deberá contribuir a «eliminar estereotipos e comportamentos tendentes a xerar discriminacións de xénero», «promover a adopción de actitudes e valores de igualdade e corresponsabilidade» y «coeducar no proceso de conciliación», según el expediente administrativo abierto para encargar su diseño a un programador.

Los usuarios tendrán que afrontar situaciones «próximas á súa realidade cotiá» y superar pruebas didácticas «que lles fagan ver que a representación dos nenos e nenas en distintos papeis é algo completamente normal». El CD-ROM, que combinará textos, fotos, ilustraciones, animaciones tridimensionales y vídeos, se elaborará «usando a linguaxe propia» del público al que irá dirigido: escolares de entre 6 y 10 años de edad.

La Vicepresidencia da Igualdade e do Benestar inició ayer los trámites de selección de la empresa que materializará este proyecto, adjudicación que prevé despachar entre mediados de septiembre y principios de octubre. La sociedad elegida entregará 15.000 copias de su trabajo, cobrará un máximo de 160.000 euros por llevarlo a cabo y habrá de terminarlo, como muy tarde, cuatro meses después de firmar el contrato con el departamento que dirige Anxo Quintana.

«Os contidos -exige el Gobierno autónomo a los licitadores- estarán locutados, para un maior dinamismo, e, como facilidade para quen o precise, incluiranse subtítulos. O idioma utilizado será o galego». En la resolución del concurso se valorará especialmente que las compañías oferten «usos innovadores da tecnoloxía», «ante todo, interactividade» y un «acabado de calidade alto».

El Ejecutivo gallego cree en la eficacia de esta iniciativa porque asume que, hoy en día, los videojuegos constituyen «unha ferramenta importante de socialización e formación da personalidade dos menores».