«Estamos vivos, que es lo que importa»

Emiliano Mouzo A CORUÑA/LA VOZ.

SANTIAGO

Un golpe dio al traste en la Costa da Morte con la travesía de una familia desde la Bretaña francesa al Caribe.

02 sep 2010 . Actualizado a las 13:34 h.

Tras la tempestad llega la calma. La familia Toulemond, Luhic, de 38 años, Clara, de 39, y sus hijos, Damián, de 11, Lucile, de 8, y Sara, de 5, cuenta a La Voz su odisea en medio del océano. Zarparon el viernes a bordo del trimarán Tribu 15 del puerto francés de Saint Malo. Llevaban todo lo necesario para navegar durante un año hacia el caribe.

A las dos horas del lunes navegaban por aguas de la Costa da Morte, a 110 millas de Fisterra. Los pequeños dormían. Su padre descansaba y Clara estaba al mando del barco. De repente un golpe fuerte «de un tronco o de un gran cetáceo», dice Luhic, machacó el flotador de babor del Tribu 15 . El agua empezó a inundar el barco. Clara tranquilizó a sus hijos, «que se comportaron como lobos de mar. Ni miedo ni una lágrima». Luhic lanzó un mayday, pero su interlocutor «no dominaba el inglés y el tiempo apremiaba». Llamó a Francia, a su padre, que movilizó a las autoridades de su país, que a su vez alertaron a Salvamento Fisterra.

«El helicóptero llegó muy rápido. El rescatador bajó varias veces, pero el fuerte viento y la marejada impedía su trabajo», recuerda Luhic. Pero en la zona también se encontraba el remolcador Don Inda que logró rescatarlos sanos y salvos.

Cansados, pero dando gracias por no haber sido tragados por el océano, durmieron esa noche en la hospedería de la Casa del Mar de A Coruña. En el desayuno se enteraron de que la Salvamar Mirfak había arribado a A Coruña remolcando su yate. En las caras de los miembros de la familia Toulemonde apareció de nuevo la sonrisa.

Sonrisa que se tornó en lágrimas, sobre todo por parte de los pequeños, al ver como había quedado su barco. «Solo chatarra», comentó Luhic. «¡Papá, mira nuestro barco!», decía llorando Lucile. Los cinco se abrazaron al lado del Tribu 15 . «Estamos vivos. Es lo que importa», dijo Clara. Hoy intentarán volver a casa, pero en coche.