A las actuaciones de la guardería de Medio Ambiente del distrito de Vimianzo y los guardas de campo de la sociedad de pescadores de Santa Comba en el control sobre el furtivismo en los ríos de la comarca del Xallas, se suma el cruce de datos y la colaboración del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), de la Guardia Civil, lo que está llevando a abrir nuevas vías de investigación y actuación con el fin de erradicar el furtivismo fluvial en la zona.
Esta coordinación se traduce en operaciones como la desarrollada el miércoles. Según trascendió, gracias a la información recabada por los distintos agentes, el Seprona inspeccionó distintos restaurantes de las comarcas de Xallas y Barcala, incautándose en uno de ellos, en Nantón, en el municipio de A Baña, de más de siete kilos de truchas salvajes que se encontraban congeladas. La comercialización de salmónidos salvajes está totalmente prohibida.