Abundan los locales vacíos en varias áreas de la ciudad y no existe un proyecto de incentivos para la creación de comercio fuera del casco histórico o de la zona centro
16 ago 2009 . Actualizado a las 02:00 h.El período de crecimiento sostenido experimentado por la economía gallega y más particularmente por el sector de la construcción en estos últimos años ha favorecido a la expansión de la ciudad, originando nuevas zonas y áreas residenciales plagadas de bajos y locales comerciales vacíos. Esto ha provocado que la falta de servicios sea un hecho palpable al que se enfrentan los vecinos y vecinas de los barrios de la ciudad de Santiago.
Zonas como la de Santa Marta, Conxo, Vite, San Lourenzo o Vista Alegre están desprovistas de comercios o negocios que proporcionen a sus vecinos los servicios de primera necesidad, lo que provoca que tengan que desplazarse a otras zonas como el casco viejo, el Ensanche o las grandes superficies comerciales para realizar sus compras diarias. En muchos de estos barrios la situación no es nueva y sus vecinos más veteranos la consideran de absoluta normalidad. María de la Concepción y Mercedes, dos vecinas y amas de casa del barrio de Vite, aseguran desplazarse varias veces a la semana al centro de la ciudad para realizar las compras. «Aquí nunca houbo moita actividade e os poucos comercios que abrían, ao rato pechaban pola falta de clientela». Y es que muchos compostelanos han asumido como normal la situación de deterioro del pequeño comercio local, teniendo que desplazarse a la zona centro o a las grandes superficies para realizar sus compras de diario.
Luís Matos, presidente de la asociación de vecinos Doutor Maceira de Conxo, asegura que en los últimos meses han tenido que bajar la persiana alrededor de seis negocios del barrio. «A crise está a desanimar aos comerciantes a abrir novos comercios na zona». La avenida de Ferrol, situada en el barrio de Conxo, se presenta como una de las calles de nueva creación con más locales vacíos de toda la ciudad. La gente identifica la crisis como la causa principal, pero, ¿y si no es la única causa?, ¿y si es cierto que los compostelanos prefieren los centros comerciales para realizar sus compras? Luís Matos apunta a la pescadilla que se muerde la cola. «Non existen comercios nos barrios e os veciños acuden ás grandes superficies. O problema está en que cando un valente decide abrir un negocio, moita xente está xa afeita ao outro e non é doado mudar de hábitos».
Para romper con esta situación, el representante de los vecinos de esta zona del sur de Santiago asegura que están intentando coordinar la creación de una asociación de comerciantes «que contribúa á posta en valor do barrio».
Yolanda Mallo es vecina de Conxo y asegura que se desplaza a otros barrios a la hora de hacer la compra. «Hay demasiados bares mientras que faltan comercios de otro tipo». Alberto Varela, vecino de Vista Alegre y encargado de la ferretería Ferrva-Herrajes no está de acuerdo y afirma que «los grandes negocios se cierran en los bares», aludiendo al derecho al bar. Según él, uno de los grandes problemas del comercio de barrio reside en la escasez de plazas de aparcamiento. Lo mismo opina su vecino del Mesón do Pulpo, que además asegura haber perdido la clientela fija del menú del día en los últimos tiempos. Cerca, otro santiagués reflexiona: si cierran lo comercios y no abren otros, los barrios se quedarán sin servicios se perderá la tertulia de carnicería «porque a El Corte Inglés no se va a hablar. Se va a comprar y en coche».