Una de cal y otra de arena impositiva. Así aprobó ayer el pleno ordense una actualización de las tasas municipales y de impuestos como el IBI y el IAE, entre otros, para el próximo ejercicio económico.
La modificación al alza del padrón fiscal ordense fue debatida en una sesión extraordinaria convocada con tiempo suficiente para que los nuevos importes sean efectivos a principios del 2009, ya que tras la aprobación ejecutada ayer es necesario dar varios pasos administrativos para que las cifras sean definitivas.
En época de recesión económica el debate del incremento de la carga fiscal en Ordes centró la argumentación de todos los partidos políticos. En algunos casos, como Nova Alternativa y el Partido Popular, sus portavoces abogaron por la congelación de las tarifas para el próximo año. Frente a este incremento cero, el BNG se mostró partidario de una subida del 4,5%, es decir el incremento del IPC en el último año. Pero en lo que sí estuvo de acuerdo toda la oposición es en cuestionar aquellas subidas que van más allá de lo establecido por el índice de precios al consumo.
El caso más significativo es el de la tarifa por recogida de la basura, que aumentará por encima de la media. Según el BNG, el incremento de esta tarifa oscila entre un 25 y más del 100% del importe actual. En la misma línea se pronunciaron los nacionalistas en relación al imposto de actividades económicas, del que se acordó eliminar su progresión.
Frente a los porcentajes, el gobierno local contestó con cantidades concretas, que en el caso de la basura suman, de media, un incremento en todo el año próximo de menos de diez euros en la zona urbana y menos de cinco en el caso de los núcleos rurales. A estos datos, el gobierno local añadió que está previsto mejorar el servicio con nuevas islas para los principales productos reciclables en todos los núcleos de población. Con todo, el grupo de gobierno reconoce que las arcas municipales deberán aportar 184.000 euros para completar la recaudación por regogida de la basura.
Menor carga fiscal
El incremento de la tarifa por la ejecución de obras por metro cuadrado también fue criticada por la oposición de Nova Alternativa, que consideró que esta no es la mejor forma de favorecer un sector en plena recesión. El Partido Popular señaló que los incrementos en impuestos y tasas aprobadas por el Concello ordense no se habían visto acompañados de mayor calidad en la prestación de los servicios, por lo que rechazó los nuevos aumentos propuestos.
El grupo de gobierno contestó a través del alcalde, el independiente Manuel Regos, que el grueso de las tasas suben el porcentaje del IPC y que en muchos de los casos están previstas exenciones para colectivos y rentas desfavorecidas, mientras que las empresas tendrán bonificaciones en varias si aplican una política medioambiental adecuada.
A modo de conclusión, el regidor replicó que un ordense pagará el año que viene una media de 167 euros, un importe significativamente inferior a la cantidad que abonará un contribuyente de Santa Comba, cuya carga impositiva asciende, de media, a 235 euros.
Con anterioridad al debate impositivo, la corporación ordense dio el visto bueno al cambio de uso de los terrenos en los que se ubica la casa consistorial de Ordes. En estos momentos este terreno estaba considerado como suelo de uso sociocultural, pero la ampliación de las dependencias obliga a cumplir con el trámite legal de que pase a ser considerad suelo de uso técnico administrativo.