La historia interminable de unas instalaciones para los agentes se prolonga ya más de diez años sin visos de solución
13 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.La historia interminable o el cuento de la buena pipa. De cualquiera de las dos maneras se podría definir la pretensión de Ordes de disponer de un nuevo cuartel de la Guardia Civil, un proyecto que colea desde hace, como mínimo, diez años pero que no acaba de hacerse realidad visible.
Primero iba a concretarse en el antiguo centro de salud, cedido por el Ministerio de Trabajo. El propio Concello, entonces comandado por Teodosio Martino (PP), había ofrecido un solar en el centro urbano. Pero el último emplazamiento que se baraja como factible es un terreno de más de mil metros cuadrados situado en la zona de O Paraíso, en las inmediaciones de la autopista AP-9.
La última revelación nacionalista de que ahora la Guardia Civil de Ordes usará un bajo pagado por el Concello y no por el Ministerio del Interior ha vuelto a levantar todas las alarmas entre los vecinos, disconformes con pagar de su bolsillo una obligación reiterada por el Ministerio del Interior.
Pero el Gobierno central parece no prever, al menos por el momento, ni aumentar la plantilla armada ordense ni construir un nuevo cuartel. No este año, como había prometido la edila ordense y diputada en el Congreso Esther Couto, quien había avanzado ya en diciembre que el proyecto ordense constaba «en una partida genérica de los presupuestos del Estado para el 2008», pues existían partidas específicas para los cuarteles de Castro Caldelas, Vilagarcía de Arousa y A Fonsagrada.
Oficialmente al menos, el Ministerio del Interior mantiene su intención de levantar el cuartel ordense en los terrenos de O Paraíso, tras rechazar las opciones del campo de la feria y la de la zona de Vista Alegre, tal y como expresó hace dos años. Entonces, se proyectaba un cuartel de veinte agentes -en la actualidad tiene once- y se solicitaba expresamente «un inmueble emblemático y representativo del cuerpo, de construcción moderna y funcional que esté ligada al patio de armas».
En esta polémica, que se ha recrudecido en los últimos años, también terció la Mancomunidade de Municipios de Ordes, que no solo se pronunció abiertamente por un aumento de la plantilla armada sino también por el nuevo cuartel. En la actualidad, esta entidad está integrada por los concellos de Cerceda, Frades, Mesía, Ordes, Oroso, Trazo y Tordoia, lo que supone una población total de 38.396 habitantes repartidos en una extensión de casi 754 kilómetros cuadrados.
La demanda de la Mancomunidade se ampara en el «incremento da inseguridade cidadá que na actualidade se está a producir en toda a comarca», según reconoce el presidente del organismo y alcalde de Oroso, Manuel Mirás.
Inversión
Ahora el Concello ha reservado 476.000 euros en la compra y acondicionamiento de un bajo que, inicialmente, irá destinado a la Policía Local, aunque los nacionalistas sospechan que serán utilizadas finalmente por la Guardia Civil. El alcalde ordense, Manuel Regos, admite incluso que la Benemérita podría utilizar «temporalmente» estas futuras instalaciones, con lo que el nuevo cuartel queda cada día un poco más lejos.