El viaducto del AVE en Aríns ya es la construcción más alta de Santiago

SANTIAGO

09 dic 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La catedral de Santiago ya no es la construcción más alta de cuantas coronan el cielo del término municipal de Compostela, y la culpa la tiene el tren de alta velocidad.

Con la vista puesta en un medio de transporte que pasará rápido, pero que llega demasiado lento, la infraestructura diseñada para que los compostelanos puedan disfrutar del veloz ingenio ha posibilitado que los 76 metros de la basílica compostelana se queden pequeños.

Aunque los pilares del viaducto de Aríns no tienen quizás el valor cultural del templo que encierra los restos del Apóstol Santiago, nadie va a discutir que sus 95 metros de altura en el punto más alto son producto de una precisa y laboriosa obra de ingeniería, en la que no cabe margen de error.

Desde Grúas Estación, empresa especializada en trabajar cerca de las nubes, confirmaban que en las obras se está utilizando una grúa que, en su punto máximo, alcanza una altura de 105 metros, y que nunca antes habían desplegado semejante brazo para una ifraestructura que se haya realizado en la capital de Galicia.

Obra espectacular

Desde la empresa dicen que este mismo martes, los amantes de vigilar las obras públicas, que son muchos y no siempre jubilados, podrán disfrutar de un momento la mar de entretenido en el entorno del viaducto de Aríns. Porque, para ese día, está previsto comenzar a unir en horizontal los pilares de hormigón más altos que ahora mismo, desde lejos, aparecen como enormes dientes que nacieran de una encía de tierra.

Todavía no hay ninguna construcción en Santiago que haya conseguido superar a los 106 metros del Edificio Hercón de A Coruña, una torre construida en 1975. Y también en la ciudad herculina se encuentra otra mole de esas en la que los vecinos rezan para que no se estropee el ascensor: el edificio Trébol, que mide unos nada despreciables 86 metros, muy cerca de los ochenta de la torre de control marítimo.

A continuación sí que viene la catedral de Santiago, 76 metros de maravilla que, de momento, han reportado más a la ciudad que los pilares del AVE.

Sin salir de la ciudad, después de la catedral, la construcción inmediatamente más alta es la torre de telecomunicaciones de la Televisión de Galicia, que tiene 56 metros. Y, justo después en esta clasificación de altura, los cincuenta metros del Gran Hotel de A Choupana, que apenas se diferencia de los 46,2 metros de la nueva torre de control de Lavacolla o de los 45,5 metros que miden las torres de Mallou, en As Cancelas.

El edificio pensado como Museo da Historia de Galicia que se levanta en el Monte Gaiás, en la Cidade da Cultura de Galicia, alcanza los 42,7 metros en su punto más alto, y para encontrar cuarenta metros no tenemos que salir del Ensanche: el edificio que se corresponde con los números 5 y 7 de la calle República do Salvador.