santiago | La Obra Romana de Peregrinaciones (ORP), una agencia de viajes directamente vinculada al Vaticano, ha alcanzado un acuerdo con la aerolínea Mistral Air, fundada por el actor Bud Spencer en 1981, para fletar vuelos «de espíritu religioso» que unan la capital de Italia -y luego Milán- con otros puntos de profunda tradición católica. Entre este grupo de localidades figura Santiago, además de la portuguesa Fátima, Jerusalén (Israel), la francesa Lourdes, Guadalupe (México) y Medjugorje, en Croacia.
Si bien durante el 2007 se realizarán algunos servicios de prueba, el desarrollo y aplicación del convenio entre las partes realmente no comenzará hasta el próximo año. Refiriéndose a la firma de ese pacto con Mistral Air, el vicepresidente de ORP, Liberio Andreatta, manifestó ayer a la agencia Efe: «Es una decisión que contribuirá al crecimiento del peregrinaje en el mundo». Por su parte, el gerente general de la compañía, Cesare Atuire, avanzó al periódico La Repubblica que los billetes se venderán «a un precio muy contenido» y que en el fuselaje de los aviones podrá leerse: «Busco tu rostro, Señor».
No obstante, antes que los religiosos, la senda de la colaboración entre las grandes ciudades de referencia para el cristianismo ya habían empezado a explorarla los políticos. De hecho, reunidos en Compostela el 13 de diciembre del 2005, representantes del Concello y gobernantes locales de Roma y Jerusalén suscribieron una alianza estratégica para el fomento de las interconexiones de visitantes, un concierto que fructificará a principios del 2008, cuando se prevé que arranque la comercialización de un paquete turístico conjunto.
Tras ser difundida por la prensa transalpina, ayer por la tarde, La Voz intentó confirmar la información sobre los futuras peregrinaciones por aire a Santiago, tanto con el servicio de comunicación de la Santa Sede como con el de ORP. Pero ambos se encontraban inoperativos. Sí pudo corroborar la veracidad de la misma a través del testimonio de empleados de Mistral Air en el aeropuerto romano de Ciampino, aunque estos afirmaron no encontrarse en condiciones de revelar más detalles sobre la operación.
Remite la crisis
La noticia coincidió en el tiempo con otra tan o más positiva para el futuro de Lavacolla. Pues también ayer trascendió que ha comenzado a remitir el principio de crisis de actividad en el que las instalaciones se hallaban inmersas desde la primavera. Por la terminal santiaguesa desfilaron a lo largo del mes pasado más de 195.672 usuarios, o sea, al menos uno más que en igual período del 2006. Sin embargo, las fuentes de la Administración central que facilitaron este dato eludieron revelar cuántos clientes exactamente fueron contabilizados.
La entidad Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) planea difundir entre mañana y el viernes próximo las cifras oficiales de tráfico en julio. Será entonces cuando se conozca con precisión el porcentaje de incremento de viajeros registrado en Compostela.
En cualquier caso, el simple hecho de que la comunidad de pasajeros crezca ya constituye una circunstancia noticiable, pues la terminal compostelana llevaba tres meses consecutivos acumulando balances en números rojos. En comparación con el ejercicio anterior, en abril perdió un 3,5% de usuarios; en mayo, otro 1,6, y en junio, un 1,9. Esencialmente, en la sucesión de regresiones subyace el recorte de movimientos entre la capital gallega y los dos principales destinos domésticos: Barcelona y, sobre todo, Madrid.