Las casas de madera de Cotobade se alquilan ya por 105 euros al mes

A. c., N. D. A. PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

El arrendamiento de varias de las viviendas se eleva hasta los 194 euros

24 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Las cinco viviendas ecológicas de promoción pública construidas en el lugar de Viascón por la Xunta ya tienen las puertas abiertas para que los inquilinos que lo deseen puedan convertir en un hogar lo que por ahora es solo una casa. Algunos de ellos cogieron ayer las llaves de mano del conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, que junto al alcalde de Cotobade, Jorge Cubela, inauguraron las viviendas tres años después de empezar.

«Ter unha casa de madeira era o meu soño, pero ata agora vivín sempre nun piso de aluguer», explicó Ana Belén Arias, una de las inquilinas. Aunque todas las casas tienen características similares, son de diferente tamaño. Dos de ellas cuentan con 88 metros cuadrados útiles y tres dormitorios, mientras las otras tres disponen de una superficie de 49 metros y solo una habitación. Pero si hay algo que hace atractiva esta construcción, además de las ventajas ecológicas, es la renta mensual. Los inquilinos de las viviendas más pequeñas pagarán entre 105 y 112 euros al mes y las familias que opten por los tres dormitorios tendrán que reservar de la nómica 194 euros. «Levo tres anos esperando por unha e xa temos as chaves. Fáltanos por dar de alta o suministro que non sei cando será», explicó Arias tras entrar por primera vez en su vivienda.

Las construcciones sostenibles se han convertido en un referente del empleo de energías limpias para el resto de la comunidad. El pavimento es de carballo macizo, colocado sobre hormigón y su exterior está revestido con pino del país. Los responsables de la Xunta, -que invirtió 2,5 millones en su construcción- destacaron ayer en Cotobade que no solo están diseñadas en madera, sino que cuentan con un captador solar colocado sobre la cubierta del garaje, que se completa con una caldera y el acumulador de energía.

«Levo tres anos esperando por unha destas vivendas e só falta por dar de alta o suministro»

Ana Belén Arias