Cultura urbana y biodiversidad global

E.L. / M.C. / Ch.L.*+redac.pontevedra@lavoz.es

PONTEVEDRA

13 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La Facultad de Ciencias da Educación vivió ayer la primera Xornada de Promoción e Participación na Cultura Urbana, organizada por la delegación de Alumnos y la asociación Vella Escola, un proyecto que utiliza las disciplinas artísticas del hip hop como herramienta pedagógica y que en líneas generales tiene como finalidad ofrecer alternativas de ocio con hábitos saludables. Medio centenar de alumnos y profesores participaron en distintos talleres de grafiti, rap, beatbox y breakdance. Son formas de expresión y comunicación muy utilizadas entre el colectivo juvenil y la contribución de estas actividades a la formación y al desarrollo de la persona a nivel social, corporal, mental y psicológico, está detrás de esta experiencia universitaria coordinada por Pablo Castiñeiras.

El obradoiro de grafiti fue impartido por Roi Barros y sus contenidos versaron sobre el lenguaje y la historia de esta forma de expresión, su uso adecuado e inadecuado y las técnicas del espray más utilizadas en el arte mural. Moncho Gey impartió el taller de aprendizaje de las técnicas del breakdance, Isaac Figueira fue el profesor de beatbox, habilidad que consiste en crear música, ritmos o melodías con los recursos corporales, fundamentalmente la boca. Y Serxio García, del grupo Dios Ke Te Crew, fue el instructor del obradoiro de rap, en el que los participantes elaboraron e interpretaron sus propias letras.

Hablemos ahora de ciencia. ¿Saben que en la Tierra hay 1,8 millones de especies conocidas, de las que un millón son insectos? ¿O que la discrepancia se encuentra en el número de especies aún no conocidas (algunos consideran que es de 1 millón y otros que puede alcanzar los 100 millones)? ¿Y que cada año desaparecen entre 10.000 y 50.000 especies? Estos son solo algunos de los apuntes de la exposición que sobre la biodiversidad global ha elaborado el CSIC y que se exhibe en el Liceo Casino, dentro de las actividades de la Semana de la Ciencia y del Año de la Biodiversidad. El profesor de investigación del CSIC Antonio Miguel de Ron fue el encargado ayer de explicar el contenido de los dieciséis paneles con los que cuenta la muestra, dirigida al público general y escolar, con el objetivo de acercar la cultura científica a la ciudadanía y también despertar futuras vocaciones. Y es que como recordó De Ron, Ramón y Cajal fue el primero en decir que al carro de la cultura española le faltaba la rueda de la ciencia. «Vamos a intentar superarlo», apostilló el investigador. Paneles. El grado de amenaza que supone para la biodiversidad la acción humana, los principales ecosistemas amenazados o las especies invasoras centran los contenidos de varios paneles. Otros están dedicados a la situación en España, cuya diversidad -valga la redundancia- climática tiene mucho que ver en que nuestro país tenga la biodiversidad más alta en Europa, con 85.000 especies conocidas de seres vivos, el 54% del continente. Sus primeras áreas protegidas fueron en 1918 Covadonga y Ordesa, y el de las Illas Atlánticas fue el último de los catorce parques nacionales declarados en el país. La apertura de la exposición fue precedida de una conferencia de De Ron sobre la historia de la agricultura y el día 19, en que se cerrará la muestra, se proyectará el documental Los mares dulces de Galicia, de Manuel E. Garci, biológo del Instituto de Investigaciones Marinas.

La viticultura también forma parte de la biodiversidad global. El Consello Regulador de la Denominación de Origen Rías Baixas viajó esta semana a Shanghai para asistir a la feria Food & Hotel. En el Le Sun Chine Boutique Hotel organizó una cena maridaje para prescriptores (importadores, prensa, sumilleres) con seis vinos y otros tantos platos de la gastronomía local. La directora de Promoción y Márketing, Eva Mínguez, explicó que «tratamos de que comprobaran las posibilidades de nuestros vinos con su propia gastronomía». Además, un grupo de profesionales de la asociación de sumilleres de Shanghai participó en un seminario-cata, que consistió en una presentación de la denominación y en una cata de cinco vinos de Rías Baixas.

Otros que también tuvieron la ocasión de vivir una jornada lectiva especial fueron los alumnos del colegio Marcos da Portela, de Monte Porreiro, que dirige Pilar Lores. Los escolares lo pasaron de lo lindo con el magosto que se llevó a cabo ayer. Además, los profesores de Educación Física les prepararon una sorpresa, un juego de la oca gigante, que ocupaba el salón de actos. Por allí fueron pasando todos los escolares, divididos en grupos, para jugar unas partidas, con las castañas como fichas.