El servicio de socorrismo en Sanxenxo se reduce desde hoy a cuatro playas
PONTEVEDRA
Aunque los turistas y vecinos todavía están agotando los últimos cartuchos de la época estival, tres de cada cuatro socorristas de Sanxenxo hicieorn ayer sus maletas al finalizar sus contratos de trabajo suscritos en su día con el Concello. Ahora, y solo hasta mediados de septiembre, solo cuatro playas del municipio turístico contarán a partir de hoy miércoles con el servicio de los vigilantes.
En las playas que se quedan sin vigilancia, los bañistas deberán extremar las precauciones y evitar situaciones de riesgo. Más de 60 socorristas velaron por la seguridad de los usuarios de los arenales sanxenxinos, en doce de los cuales ondeó la bandera azul prácticamente a diario.
«Tratamos, hace años, de firmar contratos durante los tres meses (julio, agosto y septiembre), pero fue imposible ya que la mayoría de los socorristas son estudiantes», precisó Antonio Folgada, responsable del Servizo de Emerxencias de Sanxenxo. «Los que se van ahora simplemente finalizan la temporada», añadió.
De hecho, de los 64 socorristas contratados a principios de verano, ahora solo quedan prestando servicio un total de 15. Los vigilantes cubrirán los arenales de mayor afluencia y riesgo. En este sentido, las playas de bandera azul de Silgar, Areas, Montalvo y Canelas todavía dispondrán de socorristas, apuntó Folgada.
Cien mil euros
El dispositivo de seguridad también incluye la vigilancia que se realiza desde las embarcaciones, como sucede a lo largo del verano en los arenales que carecen del servicio de socorrismo. Para dotar de socorristas a los arenales de bandera azul, el Concello invierte unos cien mil euros en sueldos durante la temporada veraniega.
Parte de esta cantidad se sufraga con una subvención que cada verano el Ayuntamiento solicita a la Xunta, concretamente a través de la Consellería de Traballo e Benestar. Además de una subvención para los socorristas, Sanxenxo, un municipio que vive por y para el turismo, reclamó otros 800.000 euros para contratar peones, policías auxiliares, administrativos y personal para aumentar la plantilla del servicio de limpieza de playas y espacios públicos.
En total, Sanxenxo contrató los servicios de 116 personas de refuerzo veraniego, puesto que la avalancha de turistas no se puede atender con los servicios disponibles a lo largo de todo el año.