La falta de suelo se suma a la escasez de financiación para acceder a Bolonia

PONTEVEDRA

27 may 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Las carencias económicas y el difícil proceso de adaptación a Bolonia se suman a la falta de espacio para acogerse a más titulaciones cuando se abra el mapa universitario del próximo año. Los decanos respaldan las declaraciones hechas a La Voz por el vicerrector del campus, Jesús Hernández, y manifiestan su descontento ante la falta de respaldo político. «No tenemos respuestas claras para que se ejecuten los terrenos de Tafisa después de 22 reuniones con la Diputación y el Concello. La Universidad quiere implantar grados pero nadie le deja», señala el director de la Escuela de Ingeniería Forestal, Luis Ortiz, que el año que viene será el último en que los estudiantes se puedan matricular en el plan actual. Y es que en el curso 2010-2011 todas las titulaciones deben tener al menos su primer curso adaptado a Europa.

El responsable de Fisioterapia, Mauel Gutiérrez, no cree que el futuro universitario de la ciudad deba estar limitado en la ubicación actual. Ortiz sentencia que «la burocracia estrangula a la Universidad». Va más allá, y tal y como declaró Jesús Hernández, señala que «deberíamos tener el mismo apoyo que en Ourense, donde la Diputación y el Concello han visto en el campus el verdadero motor económico del futuro».

Los planes europeos son un cambio para el profesor, que debe abandonar las clases magistrales y para el alumno que tiene que involucrarse más en el aprendizaje. Bolonia supone, además, una fuerte inversión económica en infraestructuras y profesorado. «Al convertirse en grados en algunos casos aumenta un curso más que necesita docentes», explica Hernández.

El vicerrector del campus asegura que «todo esto supone un coste muy elevado y después de la última reunión con el conselleiro de Cultura dijeron que no hay nada para el plan financiero».

Pese a la falta de dinero que alegan desde el Vicerrectorado, la adaptación a Bolonia es imparable. «Somos la punta de lanza de la transformación en Galicia. Lo haremos igual aunque a coste cero sea más difícil», señala.

La llegada de Bolonia al campus de Pontevedra dejará a los estudiantes con un mes entero de vacaciones sin la presión de tener que presentarse en septiembre a una nueva oportunidad para aprobar. Los convertirá en los protagonistas de la educación, convirtiendo el sistema en en método más interactivo. Este año solo afecta a los tres primeros cursos de Bellas Artes, pero en el 2010/2011 se sumarán en pleno Xestión y Fisioterapia. Todos los cursos entrarán en Bolonia de lleno y dejarán de ser una diplomatura. Los alumnos de estas titulaciones así lo quisieron con más del 80% de los votos.