Concello y Cultura tendieron ayer puentes a la Diputación para intentar salvar el vial Lérez-Monte Porreiro y el nuevo puente sobre la ría a la entrada de esta urbanización. El responsable municipal de Infraestruturas, César Mosquera, se ofreció para tratar de sacar al organismo provincial del embrollo que impide afrontar la obra. Responsables de la Consellería de Cultura, por su parte, abogaron por el diálogo con idéntico objetivo.
El vial Lérez-Monte Porreiro y el puente que lleva asociado sigue siendo una prioridad para el gobierno local que, en su día, promovió el trazado ahora rechazado y, además, quiere descongestionar la zona de A Xunqueira y el anillo de A Eiriña con la nueva infraestructura. Estos condicionantes explican que las administraciones gobernadas por el BNG pusiesen ayer todo su empeño en tratar de encontrar una solución al veto impuesto por Cultura al nuevo vial por pasar demasiado cerca del Mosteiro de Lérez y atravesar una zona declarada paraje pintoresco en 1946.
A última hora de la mañana, Mosquera ofreció la «colaboración» municipal para buscar una salida al problema y la «experiencia» del Concello en hacer frente a situaciones de este tipo. «Pola información que teño o problema ten solución e non é demasiado difícil», aseguró el concejal pontevedrés.
Solo unas horas más tarde, el director xeral de Patrimonio, Felipe Arias y la delegada de Cultura en Pontevedra, María Xesús López Escudeiro, abogaban igualmente por la «negociación» y se declaraban abiertos al «diálogo». Los representantes de Cultura dejaron abierta una doble opción: introducir «modificacións» o presentar «outra alternativa».
No obstante, ayer no se pronunciaron sobre la posible habilitación de un falso túnel en las proximidades del monasterio y dijeron que deberían ser los técnicos quienes evaluasen una evaluación de este tipo. En cualquier caso, Felipe Arias se mostró partidario de concentrar los pasos -cerca del puente de la Diputación pasará otro del AVE- a fin de que la zona de impacto de las nuevas infraestructuras sea menor. A su vez, Concello y Diputación habían descartado en su día aproximar el trazado hacia la zona de A Illa das Esculturas para evitar llevarse casas por delante.
A 36 metros de un BIC
En su comparecencia de ayer, los responsables de Cultura subrayaron que la propuesta de la Diputación implica la construcción de una glorieta a solo 36 metros del monasterio y recordaron que la zona de protección del mismo es de 100 metros al estar considerado Ben de Interese Cultural (BIC).
Todo esto supone un «grave impacto» sobre el conjunto arquitectónico, según el departamento. Además, el trazado «corta pola metade» la zona más frondosa del paraje natural que rodea el monasterio.
Aparte de la posibilidad de desplazar al puente aguas arriba o aguas abajo del actual emplazamiento, Cultura mencionó expresamente la opción de introducir en el plan actual «correccións» que «eliminen ou atenúen» el impacto sobre el monasterio y su entorno. Esta podría ser también la línea de actuación que plantee hoy César Mosquera a los dirigentes provinciales aprovechando las reuniones de comisiones informativas de la Diputación.