La Asociación de Amigos dos Pendellos se marca como próximo objetivo lograr la declaración como bien de interés cultural (BIC) para todas las construcciones que nacieron en la localidad para la feria. Éstas llegaron a superar, según apuntaron desde el colectivo, las 150 pero muchas de ellas ya desaparecieron y, en su lugar, actualmente hay viviendas u otras construcciones. «Queremos convertir Agolada nun referente de vila de feira», explicó Manuel Busto, uno de los miembros de la directiva, y en él se enmarca la declaración como BIC de la totalidad. En estos momentos, solo una parte cuenta con esta catalogación, así como con la de conjunto histórico-artístico desde 1985.
El colectivo se mostró satisfecho por el inicio el pasado mes de las obras de recuperación en el conjunto arquitectónico. «Se non exisitira a asociación, dubidamos que houbera empezado», explicó el secretario, Luis Viñas. Repasó la labor de colaboración como mediadores entre Diputación y propietarios para que la institución adquiriese ya 47 de las 73 edificaciones, así como su labor aglutinadora para conseguir el acuerdo entre las distintas administraciones, además de organizar numerosos actos en los pendellos. Pero, una vez conseguido esto, ya tienen nuevos proyectos. La directiva recordó que aún está sin definir la nueva fase de trabajo, en los que ellos piden que se destine alguna de las construcciones a albergue.
Actividad por la Feira do 12
Otra de las medidas en las que incidirá la asociación para darle uso a los pendellos es que parte de los puestos feriales de la Feira do 12 se trasladen a ellos. Sus miembros explicaron que algunos de los vendedores ya le mostraron su consentimiento para hacerlo después de consturlaes. Indicaron que para ello son precisos servicios como puntos de luz o adecuar el paviemento. Amigos dos Pendellos calificó como básico que una vez se concluyan la rehabilitación de las primeras construcciones se les dé uso. Además, colaborará para la puesta en marcha del Museo das Feiras, que sirva también como oficina de turismo. Los integrantes del colectivo piden que se dote de una posada de turismo rural al recinto, de un albergue juvenil y que las asociaciones puedan usar los locales. Uno de los objetivos en el que trabajan es la recuperación de la zona de A Parranda como era originalmente y dotar la zona de un paseo con pórticos.