Los hoteles pierden 11.000 euros al día por el bajón turístico del puente

PONTEVEDRA

La ocupación registró un 65%, pese a que los empresarios esperaban que se alcanzase un 85%

09 dic 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El mal tiempo y la crisis han hecho que los hoteles de la ciudad ingresasen once mil euros menos cada día durante el puente de la Constitución, una de las vacaciones más rentables para el sector y que este año se ha visto contra las cuerdas al registrar una ocupación del 65%.

Los hoteleros aseguran que no es tanto la mala situación económica, como la psicosis social que reduce el gasto en ocio a las puertas de las vacaciones más consumistas del año, la Navidad. Sin embargo y pese a que durante todo el año la ocupación no superó el 50% o 55%, desde la Asociación Empresarial de Hosteleros de Pontevedra (Asehospo) esperaban que los hoteles de la ciudad alcanzasen el 85% de ocupación. Esperaban que este año se llegase las mismas cotas de ocupación que en campañas anteriores, pero al registrar el 65%, la caída supuso un 20% menos de lo esperado. «El puente no ha cuadrado muy bien al ser solo festivo el lunes», señala el presidente de la asociación, Bernardo Quinteiro, quien culpa a la mala climatología de la falta de turistas en la ciudad. Teme que esta ausencia de visitantes sea el preludio de un 2009 muy negro, con un descenso todavía, más acusado de turistas. De las 800 plazas disponibles en la ciudad del Lérez, solo han sido reservadas 500 habitaciones, para las que los turistas destinan el 47% de su presupuesto vacacional, lo que significa un desembolso de cerca de 43 euros por persona.

Menos consumo

El presidente del Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo, Francisco González, se ciñe a la rentabilidad, ocupación y facturación para poder evaluar el turismo en época de crisis.

Asegura que aunque el descenso en la ocupación son leves en la villa sanxenxina, la rentabilidad y facturación de las empresas ha sido más notable. «El consumo cayó entre un 10 y un 20% dependiendo del sector, sobre todo en establecimientos menos lujosos», explica González. Para entenderlo, el presidente del Consorcio indica que «los únicos que no han perdido clientela son las hamburgueserías». Por tanto, aunque la ocupación sea prácticamente invariable en localidades turísticas, la rentabilidad ha bajado drásticamente, golpeada por la crisis de consumo.

Los empresarios hoteleros de la provincia no tiran la toalla y a falta de de veinte días para el final del año, esperan que las visitas familiares, que repuntan siempre durante las Navidades, les ayuden a cerrar un annus horribilis .